En los próximos dos meses se agotará el inventario de la mayoría de medicamentos antirretrovirales (para el control del VIH/sida) para las personas que son atendidas por el Seguro Popular.

La situación es de alarma en el sector porque las adquisiciones correspondientes a este año forman parte de la primera compra consolidada que organizan las secretarías de Salud (Ssa) y de Hacienda y Crédito Público (SHCP), la cual se prevé concluya en junio.

Según el calendario de actividades difundido por las dependencias federales, la publicación de la convocatoria para las licitaciones se realizará el 7 de mayo; el 27 de ese mes se hará la presentación y apertura de proposiciones de la industria farmacéutica, y los fallos se darán a conocer el 10 de junio.

Después, las entregas de los productos se harán en julio y septiembre. Si no hay cambios y, salvo los fármacos que están protegidos por una patente y podrían estar disponibles antes de los plazos señalados –porque hay un solo proveedor–, habrá un grave problema de desabasto de medicamentos.

Esto es lo que se desprende de la información contenida en el sistema electrónico que administra el Centro Nacional de Prevención y Control del VIH/sida (Censida). Hasta el pasado 25 de marzo, de una lista de 38 moléculas, 21 se terminarán en las siguientes ocho semanas, mientras de otras 10 claves sólo hay existencia para tres meses.

Distribución

El problema es que las terapias antirretrovirales no deben suspenderse. Cualquier interrupción pone en riesgo la salud y calidad de vida de las personas que viven con VIH/sida. Los tratamientos prescritos y tomados de manera adecuada garantizan que los niveles del virus en sangre se mantengan bajo control y en el mejor de los casos, en niveles indetectables.

Desde hace más de 15 años, en el país hay cobertura universal de estos medicamentos. La adquisición de los fármacos se ha realizado en el nivel central y se distribuyen a cada centro ambulatorio para la prevención y atención en sida e infecciones de transmisión sexual (Capasits), en los institutos nacionales de salud y hospitales de alta especialidad donde se brinda la atención.

De esta manera se ha podido garantizar la entrega oportuna de los tratamientos, que es un elemento fundamental del proceso y de las acciones para frenar la epidemia de VIH/sida en el país. Otros factores tienen que ver con la detección y atención médica oportuna de la infección.

Respecto de los medicamentos y el proceso de la compra correspondiente a 2019, fuentes consultadas por este diario recordaron que las licitaciones se habían realizado en el primer trimestre de cada año, de tal manera que a partir de abril se iniciaban las entregas en las farmacias. Asimismo, señalaron que la Secretaría de Salud tendrá que dar una respuesta rápida a este problema.

Sobre todo, expresaron, es necesraio evitar el desabasto y garantizar que las licitaciones se lleven a cabo sin contratiempos.