Jubilada de la industria editorial enfrenta demanda en una corte por dedicar su casa a los Picapiedra
Sábado 6 de abril de 2019, p. 4
Hillsborough, Cal., Enormes dinosaurios erguidos junto a fantasiosos hongos en el inclinado patio trasero. Un Pedro Picapiedra de tamaño real recibe a las visitas en la puerta principal. Y junto a la cochera y sobre el césped, está un enorme letrero naranja, púrpura y rojo que dice Yaba daba dú
.
La batalla más reciente en la guerra entre las reglas del gobierno y los derechos de propiedad se desenvuelve en un lujoso suburbio en San Francisco, donde una magnate jubilada de la industria editorial instaló un elaborado homenaje a la familia Picapiedra. La llamativa y protuberante casa está rodeada de esculturas de la Edad de la Piedra inspiradas en esa caricatura de los años 1960 del siglo pasado, junto con alienígenas y otras rarezas.
Miles defienden la llamativa propiedad
La controversia ha provocado que la prensa internacional cubra el hecho y miles de personas han firmado una petición en Internet para preservar la llamativa propiedad que es visible desde una carretera cercana.
La casa de 254 metros cuadrados no está en riesgo, pero el pueblo de Hillsborough dice que la propiedad de la multimillonaria Florence Fang es una molestia pública y una monstruosidad. El mes pasado, las autoridades interpusieron una demanda en una corte estatal para obligarla a quitar las esculturas que instaló sin permiso en su jardín.
La abogada de Fang, de 84 años, Angela Alioto dijo que las autoridades esnobs quieren quitarleel derecho constitucional a su cliente de disfrutar su jardín y promete que luchará enérgicamente.
‘‘La señora Florence Fang ha hecho sonreír a la gente, les ha dado alegría. ¿Qué no gusta de Dino, que se comporta como un perro?”, dijo Alioto, antes supervisora de San Francisco. ¿Qué le pasa a esta gente?
Mark Hudak, abogado de Hillsborough, opinó que el pueblo se enorgullece de su ambiente rural y boscoso, y que hay reglas ‘‘para que los vecinos no tengan que ver tu versión de lo que te gustaría tener y tú no tengas que ver la suya.
‘‘Ya sea que construya un proyecto con divertidos personajes de caricaturas, esculturas de Rodin o cualquier otra cosa tiene que pasar por el proceso como todos los demás”, dijo.
La casa con forma inusual, actualmente pintada de rojo y púrpura, fue diseñada por el arquitecto William Nicholson y construida en 1976. Fang, una reconocida filántropa que alguna vez editó el periódico San Francisco Examiner, compró la propiedad en junio de 2017 por 2.8 millones de dólares.