El INER recibió $1.8 millones
Pendiente, reposición de fondos para guardias y suplencias de médicos contratados por honorarios
Miércoles 29 de mayo de 2019, p. 14
De manera paulatina y de a poco
empezó a llegar el dinero a los institutos de salud y hospitales de alta especialidad. En el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) se informó de la liberación de 10 por ciento de los recursos retenidos.
De los mil 200 millones de pesos que la Secretaría de Hacienda congeló en tres reservas consecutivas de los presupuestos de diferentes áreas de la Secretaría de Salud (Ssa), así como de los hospitales e institutos, 10.8 millones fueron del INER, con lo que de acuerdo con información extraoficial, estaría recuperando 1.8 millones en una primera entrega.
Datos obtenidos por este diario señalan que algo similar está ocurriendo en el resto de nosocomios. De cualquier manera, para todos los organismos prestadores de servicios médicos afectados aún está pendiente la reposición de los recursos asignados originalmente para guardias, suplencias y de personal médico, enfermería y técnicos contratados por honorarios.
Las plazas que se han pagado mediante estas figuras administrativas se han utilizado durante años para subsanar las carencias de trabajadores en las áreas de atención a pacientes. En otros casos se ha contratado especialistas en el manejo de equipos de alta tecnología.
Esa fue la alternativa a la prohibición –también dictada desde Hacienda– de ocupar plazas de base vacantes, las cuales tienen asignados sueldos más elevados, así como prestaciones económicas y sociales. Ahora, de acuerdo con funcionarios, han recuperado algunos recursos para cubrir ciertos huecos
en los servicios hospitalarios.
Integrantes del sector recordaron que los recortes presupuestales en el área de salud han sido una constante en todos los gobiernos. Sólo en el sexenio pasado, durante al menos tres años consecutivos (2014 a 2016) se tomaron estas medidas.
En todos los casos, los llamados ajustes
tuvieron repercusión en hospitales e institutos de salud, así como en los fondos que administra la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS), en particular el Seguro Médico Siglo XXI, con el que se atendían todas las enfermedades de niños desde el nacimiento hasta los cinco años de edad, y del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos.
La disminución de los recursos de este último implicó en 2016 que se pospusiera la incorporación de nuevas enfermedades de alto costo (La Jornada 30/6/2016).
Ahora, la novedad es que los directores se hayan organizado para protestar y acudir juntos a la Cámara de Diputados a solicitar apoyo.