Washington. Ocho obras arquitectónicas del estadunidense Frank Lloyd Wright, entre ellas el museo Guggenheim de Nueva York, así como los antiguos monumentos de Peskov, en Rusia; el yacimiento arqueológico Risco Caído y los Espacios Sagrados de Montaña de Gran Canaria, en España, y un sitio aborigen australiano, fueron inscritos ayer en la lista del patrimonio mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por sus siglas en inglés).

Mediante un comunicado, el organismo precisó que las edificaciones elaboradas por Frank Lloyd Wright –casi todas concebidas y construidas durante la primera mitad del siglo XX en su país natal– dan testimonio de una arquitectura orgánica caracterizada sobre todo por un plano abierto, una difuminación de los límites entre el exterior y el interior, y el empleo inédito de materiales como el acero y el cemento.

Con sus célebres curvas blancas, la actual sede del museo Guggenheim de Nueva York fue inaugurada en 1959, año en que murió Wright, a los 91 años.

De Illinois a California, pasando por Arizona y Wisconsin, la lista se completa con siete construcciones pensadas como viviendas privadas –como la Casa de la cascada, situada en el paraje Mill Run, en Pensilvania– lugares de culto, de trabajo o de esparcimiento.

Con esta decisión, Estados Unidos cuenta ahora con 24 sitios en la lista del patrimonio mundial de la Unesco. Este es el primero en el dominio de la arquitectura.

Otros nombramientos

En tanto, los monumentos de Peskov, ciudad situada en el noreste de Rusia, también fueron incluidos en la lista. La decisión fue aprobada por el Comité del Patrimonio Mundial en su reunión 43, que se inició el 30 de junio y concluye el 10 de julio en Bakú, capital de Azerbaiyán, bajo la presidencia del ministro de Cultura de ese país, Abulfas Garayev.

El centro histórico de Peskov ha conservado su antiguo núcleo, el Kremlin, destacado conjunto de antiguas fortificaciones arquitectónicas rusas de los siglos XIII al XVIII, así como monumentos de la arquitectura civil de los siglos XVII al XX, la arquitectura eclesiástica de los siglos XVII al XX, incluidos los tesoros únicos de la pintura mural que datan de los siglos XII al XIV.

El ministro de Cultura español, José Girao, se congratuló por la incorporación del paisaje de Risco Caído y los Espacios Sagrados de Montaña de Gran Canaria, que reúnen vestigios de una cultura aborigen que habitó esta isla volcánica hasta finales del siglo XV.

España suma 48 bienes declarados patrimonio mundial de la Unesco, siendo el tercer país con mayor presencia en esa lista.

Descrito por el escritor Miguel de Unamuno como la tempestad petrificada, este paisaje situado en el interior de la isla de Gran Canaria del archipiélago de las Canarias, es una zona abrupta, con riscos, barrancos y una colosal caldera generada por una erupción volcánica.

El espacio protegido incluye 10 yacimientos con poblados y lugares de culto que atestiguan la vida de esta sociedad originaria de la cultura bereber del norte de África, que se desarrolló de forma aislada durante mil 500 años.

Finalmente, la Unesco explicó que el paisaje cultural Budj Bim, inventado por los Gunditjmaras hace unos 6 mil 600 años y ubicado en el sudeste de Australia, fue inscrito como patrimonio mundial debido a que ese pueblo indígena implementó una de las redes de acuicultura más grandes y antiguas del mundo.

“Este sitio aborigen es más antiguo que las pirámides de Egipto; cobra relevancia porque fue ahí donde las poblaciones indígenas de Australia desarrollaron hace miles de años una sofisticada red de acuicultura.

Sus canales, diques y represas servían para contener las aguas de las crecidas y crear estanques para atrapar, almacenar y recolectar la anguila, que proporcionó a la población una base económica y social durante seis milenios.