Los precios de limón, naranja y jitomate se dispararon nuevamente en el último mes, denunció la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).

A escala nacional el limón se vende, en promedio, a 32 pesos por kilo, lo cual implica un aumento de 82.64 por ciento entre el 15 de julio y el 15 de agosto.

Sin embargo, en Nuevo León el incremento fue hasta de 140 por ciento; en Jalisco, Guanajuato e Hidalgo de 100 por ciento; en la Ciudad de México de 94.44 por ciento, y en el estado de México de 86.67 por ciento.

El jitomate cuesta casi 20 pesos, 28.57 por ciento más que en julio, pero en Hidalgo subió 78.57 por ciento, detalló la organización.

Cada mes la Anpec efectúa un monitoreo de precios en diferentes estados de una canasta básica conformada por 38 alimentos, artículos de higiene personal y productos para la limpieza del hogar.

En el último mes la organización detectó que se encarecieron 23 de los 38 productos analizados en tasas que van de menos un punto porcentual al ya mencionado 140 por ciento del limón. Otros 11 productos bajaron de precio, y solamente tres permanecieron sin cambio.

Además del limón y el jitomate también subieron de precio el tomate verde, los chiles frescos y enlatados, la papa, la naranja, el huevo, el frijol, el aceite, los cigarros, el atún en lata, la gelatina en sobre, la harina de trigo, el azúcar, la sardina, el chocolate en polvo, las galletas Marías, el detergente en polvo, el papel higiénico y la pasta dental.

Hablar de desaceleración económica es hablar de que se ha disparado la carestía de la vida en México, circunstancia que marca un empobrecimiento del poder de compra, sin perder de vista que los gastos familiares no sólo contemplan la adquisición de alimentos, sino también los de vivienda, transporte, salud, educación y vestido, entre otros. Por ello resulta más que obvia la necesidad de un nuevo aumento salarial que venga a fortalecer el poder adquisitivo de las familias respecto del año anterior, por lo que urge recuperar la calidad de vida perdida de los mexicanos, expresó Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Anpec.

Hizo un llamado al gobierno federal a poner la economía al centro, una economía al servicio de la sociedad, en favor de la inclusión social, que acote el flagelo de la desigualdad y abata la pobreza.

Consideró que la dependencia económica y comercial de México con Estados Unidos pone a la población a merced de la guerra que el vecino país protagoniza con China. Si Estados Unidos pierde, dijo, México sufrirá graves consecuencias.

El dirigente empresarial sostuvo que se requiere trazar nuevas estrategias de crecimiento y alianzas comerciales que permitan al país más opciones de desarrollo.