Miércoles 25 de septiembre de 2019, p. 28
Caracas. La bancada oficialista retornó ayer a la Asamblea Nacional venezolana luego de más de dos años de enfrentamientos con la mayoría opositora.
En un debate de casi cinco horas, los representantes de la oposición ratificaron que se debe convocar a elecciones presidenciales, mientras los oficialistas exigieron el levantamiento de las sanciones financieras impuestas por Estados Unidos.
¡Chávez vive, la patria sigue!
, corearon los casi 40 diputados a su llegada al palacio legislativo en Caracas. En medio de gritos, abucheos y reclamos, la sesión de la asamblea presidida por el líder opositor Juan Guaidó finalizó sin incidentes como los ocurridos en el pasado con golpes y empujones.
Hay un reconocimiento implícito al único órgano legítimo de Venezuela, que es el Congreso
, afirmó Guaidó antes de las deliberaciones en las que acusó al gobierno de Nicolás Maduro de haber provocado una emergencia humanitaria
.
El máximo tribunal, de línea oficialista, declaró en desacato a la Asamblea Nacional en 2016, por lo que todas sus decisiones son consideradas nulas. La crisis institucional se consolidó en 2017 con la instalación de una Asamblea Constituyente a propuesta de Maduro, integrada exclusivamente por chavistas.
Estamos listos para ayudarles a salir del desacato
, declaró el coordinador de la fracción chavista, Francisco Torrealba.
La vuelta de los legisladores oficialistas forma parte de un diálogo iniciado el 16 de septiembre entre el gobierno y un grupo de la oposición que cuenta con seis congresistas.
En tanto, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional anunció ayer que entregará 52 millones de dólares a la oposición que lidera Guaidó.
Por otra parte, Uruguay abandonó ayer del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, tras la decisión de los estados miembros de activar este pacto de defensa contra el gobierno de Maduro.
La salida se hará efectiva en dos años.