Información mundial creciente sobre bien-estar subjetivo (BES) // Problemas de comparabilidad y confiabilidad
a medición del bien-estar subjetivo (BES) se ha generalizado en el mundo. La organización Gallup incluye la satisfacción con la vida en su encuesta mundial Gallup World Poll: <https://www.gallup.com/ services/170945/world.poll.aspx >. Ruut Veenhoven, de la Universidad Erasmus en Rotterdam, ha construido la World Database of Happiness (Base mundial de la felicidad) que sistematiza la información sobre BES en el planeta. <https://worlddatabaseofhappiness.eur.nl/ /hap_quer/hqi_fp.htm>. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), ha promovido que sus 35 países miembros lleven a cabo encuestas de bienestar individual autorreportado (Biare), como ocurre en México. LaOCDE publica desde 2011, cada dos años, un informe llamado How’s Life? Measuring Well-being (¿Cómo está la vida? Midiendo el bienestar), en los cuales explora detalladamente los resultados de dichas encuestas y muchas otras fuentes de información. Hoy examino algunos contenidos de la edición sobre 2017 de este informe. Esta línea de actividad de la OCDE se derivó del informe de la Comisión integrada por Stiglitz, Sen y Fitoussi, a iniciativa del entonces presidente de Francia, Nicolas Sarkozy. La versión corta del informe, publicada como libro ( Mis-measuring our lives; Midiendo mal nuestras vidas
, The New Press, Londres y Nueva York, 2010), la comenté críticamente en Economía Moral del 1º de octubre de 2010). En ese año aún no me había adentrado en las mediciones del BES, por lo cual mis críticas se refirieron a otras dimensiones. El informe de 2017 describe así el enfoque de la OCDE para medir el bienestar:
“El marco conceptual de la OCDE para medir el bienestar… tiene varios rasgos importantes: a) Pone a las personas (individuos y hogares) en el centro de la evaluación, enfocando las circunstancias de su vida y sus experiencias de BE. b) Se centra en los resultados de BE… Por ejemplo, en educación, la medición se enfoca en las habilidades y competencias desarrolladas, en vez de en el dinero gastado… c) Incluye resultados tanto objetivos (es decir, observables por un tercero) como intrínsecamente subjetivos (sólo la persona involucrada puede informar sobre sus estados y sentimientos internos), reconociendo que la evidencia objetiva sobre las circunstancias de la vida de las personas puede ser complementada por información de las experiencias de vida de las personas. d) Considera la distribución de los resultados de BE entre la población como un rasgo importante del BE de las sociedades… Esto es porque los promedios nacionales esconden las fuertes variaciones al interior de los países, y es importante saber si la vida está mejorando no sólo en promedio, sino en todos los grupos de la sociedad. e) El enfoque para valorar los recursos para el BE futuro se enfoca a los sistemas naturales, económicos, humanos y sociales que constituyen y sostienen el BE individual en el tiempo. Estos sistemas están apuntalados por acervos de ‘capital’ o recursos [capital natural, capital económico, capital humano y capital social]. (pp. 23-24)
La publicación considera tres tipos de indicadores: condiciones materiales, calidad de vida (donde incluye BES) y recursos para el BE futuro. Aquí me interesa, sobre todo, el BES. El BES se capta con la pregunta ¿Podría decirme qué tan satisfecho se encuentra actualmente con su vida?
y se le pide a la persona entrevistada que elija el número que mejor “refleja su opinión al respecto ( sic) desde cero (que significa totalmente insatisfecho) hasta 10 que indica totalmente satisfecho. Los promedios nacionales obtenidos y publicados en el informe 2017 fluctúan sólo entre 5.9 en Corea del Sur, el más bajo, y 8.1 en Canadá, el más alto. México está empatado, en 2º lugar con Austria, Finlandia y Suecia, con 8. (cuadro A.25, p. 400). La satisfacción promedio con la vida de 30 países de la OCDE con datos disponibles resultó de 7.3. El mismo informe presenta la evolución de los puntajes de la satisfacción en la vida (BES), en los países de la OCDE, en 2005-07, 2008-2010, 2011-2013 y 2014-2016, tomados de la Encuesta Mundial de Gallup. Los niveles de calificación de casi todos los países resultan más bajos que los captados por la OCDE, lo cual puede explicarse tanto por diferencias del muestreo como de la enunciación de la pregunta. Gallup usa muestras urbano-rurales de mil personas por año en cada país, pero publica sólo resultados promedios de tres años, mientras, al menos en el caso de México, el Biare se levanta sólo en ciudades y el tamaño de la muestra es más del doble. La pregunta formulada en Gallup es: “Imagine una escalera con peldaños numerados del cero, en la parte más baja, al 10 en la más alta. Suponga que el peldaño más alto representa la mejor vida posible para usted y el peldaño más bajo la peor posible para usted. ¿En qué peldaño siente usted que está en el presente, personalmente?” La diferencia en la ubicación de México entre el Biare y Gallup es dramático: de 8 a 6.6, del lugar 2 al 21. No parecen comparables los resultados y arrojan serias dudas sobre la robustez del método. La gráfica muestra la evolución de los datos Gallup para México y los compara con los valores promedio para países de la OCDE. El aumento hacia la mejor vida posible en los años de la gran crisis hace dudar de la validez de la muestra.