De vehículos usados por gente ruda, mal portada, barbones y panzones, como se ha estigmatizado por décadas a los motociclistas, las unidades utilizadas por éstos se están convirtiendo en un medio de transporte para el trabajo, sobre todo en las grandes ciudades, aseguró Francisco Medina, vocero del Salón Internacional de la Motocicleta México.

Se estima que entre 17 y 20 por ciento del medio millón de motocicletas que circulan en la Ciudad de México se usan para trabajar.

Muchas personas que no tienen acceso a un trabajo formal han optado por autoemplearse en el servicio de entrega de comida y así tener una fuente de ingresos, añadió Medina momentos antes de que se diera el banderazo de salida a unos mil 500 motociclistas que este domingo participaron en la décima edición de la rodada Pasión por la Seguridad del Monumento a la Revolución a Santa Fe, organizada por el Salón Internacional de la Motocicleta.

Cada vez hay más gente que se incorpora a las filas del motociclismo, en parte debido a la accesibilidad para adquirir estos vehículos, ya que se pueden comprar a partir de 15 mil pesos y a plazos, todo ello sin tener los conocimientos suficientes ni las medidas de seguridad, por lo que urge lanzar campañas para usar el casco adecuado, pues no usarlo o utilizar uno inadecuado puede provocar la muerte del conductor en un accidente, indicó.

Y es que en una moto tú eres la carrocería, añadió, al señalar que desde la primera edición de la rodada, hace 10 años, su objetivo ha sido fomentar la seguridad.

Por ello, dijo, se promueve el no niños en las motos y jamás montar a dos o tres personas en una unidad, porque es irresponsable.

Comentó que de la tasa de accidentes a nivel nacional la mayor cantidad ocurre en zonas urbanas, sobre todo en intersecciones, porque alguien se pasó el alto, porque alguien se dio la vuelta y no vio que traía un vehículo o por desconocimiento al no saber que conduce en el punto ciego de un auto.

La clave es respetar las reglas viales y tomar un curso de seguridad, donde se aprende sobre puntos ciegos, reglas viales, los peligros que conllevan la lluvia y algunos topes; hay cursos hasta por 2 mil pesos indicó.

Gilberto Palacio Aguirre señaló que a la par del aumento en el uso de la moto hay una mala imagen del motociclista de malandro, por lo que invitó a la ciudadanía a denunciar cuando se presente un acto delictivo, pues sin denuncia no podrá haber castigo o quitar de la circulación a un depredador social.