Lunes 28 de octubre de 2019, p. 24
Santiago. El presidente chileno, Sebastián Piñera, seguía el domingo sin poder detener las multitudinarias protestas al cumplirse 10 días de un estallido social que a diario amplía sus exigencias, desde más ciclovías hasta una nueva Constitución.
Con la consigna ¡Chile despertó!
, miles de personas se congregaron el balneario de Viña del Mar (120 kilómetros al oeste de Santiago), para un recorrido de Valparaíso al Congreso por la avenida España, que bordea el océano Pacífico.
Unas 15 mil personas, según la policía, se reunieron en un parque cercano al centro de Santiago para participar en el festival Por el Derecho a Vivir en Paz.
Por otro lado, un millar de ciclistas daban vueltas entre las 12 cuadras que separan el presidencial Palacio de la Moneda, en la principal plaza de la capital chilena, que el viernes fue el escenario de la mayor manifestación en la historia del país, con más de 1.2 millones de personas, mientras en barriadas aumentan los cabildos populares.
Las protestas han dejado 20 fallecidos y cientos de heridos, en medio del control de la policía y los militares que fueron sacados a las calles en el contexto de un estado de emergencia que fue levantado ayer. En Santiago y otras ciudades se realizan vigilias para orar por los muertos.
El Partido Comunista y el Frente Amplio llegaron a un acuerdo para presentar ante la Cámara de Diputados una demanda constitucional contra el presidente Sebastián Piñera. A su vez, el presidente del Senado, Jame Quintana, del Partido por la Democracia, comentó que no ve otra salida para la actual crisis social que un proceso para elaborar una nueva Constitución
.
El gobierno informó que los hechos vandálicos han disminuido notoriamente.