Domingo 3 de noviembre de 2019, p. 12
Con el sueño de tener un lugar en que las mujeres estén fuera de peligro, puedan decidir sobre sus cuerpos y donde morir asesinadas no sea una opción, decenas de feministas marcharon en la Ciudad de México por la memoria, justicia y verdad para las víctimas de feminicidio.
Comenzaron en el Monumento a la Revolución. Con un poema y una ofrenda a las miles de mujeres y niñas asesinadas, integrantes del colectivo Las del Aquelarre dieron paso a una batucada que dio el inicio de la cuarta Marcha de las Catrinas convocada por grupos feministas.
El recorrido hacia el Antimonumento colocado frente al Palacio de Bellas Artes entre cantos, arengas y la demanda de ningún asesinato más en contra de las mujeres. Hacer justicia es la única manera de honrarlas
, se podía leer en la espalda de una gran catrina de papel maché que iba en la vanguardia.
Sobre Paseo de la Reforma y luego en avenida Juárez se podían escuchar en coro: Ahora que estamos juntas, ahora que sí nos ven; abajo el patriarcado que va a caer, arriba el feminismo que va a vencer
.
Pasaban de las 18:30 horas y la marcha llegó al Antimonumento donde sobre un mapa de la República Mexicana colocaron flores, cruces con leyendas que decían #NiUnaMás
y fotos de niñas asesinadas o desaparecidas. Sofi, una pequeña de seis años ayudaba a colocar las imágenes, veladoras y mensajes de justicia.
El colectivo demandó a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México declarar alerta de violencia de género contra las mujeres (AVGM) en la capital del país.
A la procuradora general de Justicia capitalina, Ernestina Godoy, le pidieron que tampoco queremos que nos fabrique culpables, simplemente queremos justicia
. Al titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Omar García, solicitaron que atienda su responsabilidad como agente de prevención en los casos de violencia de género e instruya y supervise a su personal operativo para respetar los derechos humanos de las mujeres
.
Exigieron a jueces y magistrados ejercer su trabajo con total apego a los estándares internaciones para garantizar el acceso a la justicia de víctimas y sus familiares.
Demandaron al Congreso capitalino que su labor se encamine a la progresividad de los derechos, de manera que no exista laguna jurídica que permita la impunidad, se busque castigo a la corrupción, se erradique la violencia institucional y se brinden las herramientas jurídicas que permitan un pleno acceso a la justicia y reparación del daño.