Con dirección de Claudia Ríos, se monta en la sala Héctor Mendoza
Viernes 29 de noviembre de 2019, p. 4
El sentido de la existencia y del libre albeldrío son los temas centrales de la obra La vida es sueño, el clásico de Pedro Calderón de la Barca, con cuyo estreno la Compañía Nacional de Teatro (CNT) concluirá su temporada anual 2019.
El montaje será presentado del 28 de noviembre al 23 de febrero de 2020, en la sala Héctor Mendoza, sede de la CNT, bajo la dirección de Claudia Ríos, quien al lado del elenco realizó una adaptación sustentada en la versión de Zaragoza de 1636, aunque retoma varios pasajes de la versión de Madrid de 1640.
Se hizo una mezcla de ambas. La obra, como todas las de su tiempo, está escrita para que los espectadores salieran y regresaran, entonces los actores repetían de manera constante la historia. Hicimos algunos cortes, lo cual es un desafío, porque los versos están encadenados, y meter mano implica quitar ritmo y orden a las ideas
, explica la directora escénica.
Es la segunda ocasión en que esta versión se pone en escena en el continente americano. La anterior fue en 2004, también bajo la dirección de Claudia Ríos, quien resalta que la apuesta del montaje está centrada en la belleza y fuerza del texto y el trabajo actoral.
“Es una obra muy difícil para todo el mundo –explica–, por todo lo que significa; por sus dimensiones poética, filosófica, ontológica; por lo que representa para la literatura universal; porque montarla requiere de muy buenos actores que puedan con las exigencias del texto.”
Para la creadora escénica, es incuestionable la vigencia de esta pieza teatral, debido a que aborda aspectos como los derechos, la libertad y la pérdida de la misma, así como la responsabilidad del libre albedrío.
Es una obra de enorme dimensión poética que confronta sobre el significado de la vida y el proceder. También me encanta porque pone a la mujer como ser independiente, fuerte, valeroso. Los dos personajes femeninos que aparecen nada tienen que ver con los estereotipos que se conocen de la mujer.
El argumento de La vida es sueño se centra en el aspecto efímero y fugaz de la existencia y en el delgado límite entre lo que consideramos real y ficticio. Se remonta a una época en la que el ser humano descubre que no es el centro del universo y, por tanto, se torna consciente de la rapidez con que sucede la vida, el juego de realidades, ilusiones y sueños en que ésta se convierte.
El primer actor Arturo Beristáin, integrante del reparto, coincide con el decir de Antoni Gaudí de que la originalidad consiste en retornar al origen y lamenta que actualmente esté de moda en el teatro regresar a los clásicos, pero como anécdota y no como poética.
Uno tiene que ser de su tiempo y decir lo que nos conecta con lo que dijeron los clásicos, pero nos hemos olvidado de la palabra, del verso. Me parece una tontería perder la belleza que tienen los clásicos.
La escenografía, de Kay Pérez, busca estimular la sensación de que se borran las fronteras entre el sueño y la realidad, mediante un espacio de ensoñación y de acercamiento de los espectadores a la escena.
Las funciones de La vida es sueño son jueves y viernes a las 20 horas, sábados a las 19 y domingos a las 18 horas. La temporada será interrumpida el 15 de diciembre y retomada a partir de 9 de enero. La sala Héctor Mendoza se ubica en Francisco Sosa 159, Centro de Coyoacán.