En el desenlace de las negociaciones para modificar el texto original del acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), el país aceptó conclusiones razonables y ni un sólo resultado es una píldora amarga que nos hayamos tenido que tragar, sostuvo el subsecretario y negociador comercial para América del Norte del gobierno mexicano, Jesús Seade. Luego de destrabarse el acuerdo trilateral en el Congreso de Estados Unidos, expresó que no hay prisa para su ratificación.

Durante su intervención en Palacio Nacional en la ceremonia de la firma del documento, Seade reconoció que han sido discusiones muy difíciles en las cuales hubieron intensas presiones, principalmente provenientes de Estados Unidos. Sin embargo, el saldo de ese largo proceso de negociación es un tratado muy bueno, muy importante para México.

Ante el presidente Andrés Manuel López Obrador y el negociador de Estados Unidos, Robert Lighthizer y la viceprimera ministra de Canadá, Chrystia Freeland, el subsecretario hizo un apretado recuento de los puntos más complicados hacia el final de las negociaciones, en el que destacó la verificación de la vigencia de la reforma laboral en México.

Mencionó que la demanda de Estados Unidos de incluir a supervisores de empresas locales fue rechazada y sustituida por el esquema de paneles con la representación de un representante estadunidense, un mexicano y un tercero de otros países.

Aseveró que nunca se puso en duda la instrumentación de una reforma laboral gigantesca, pero querían garantías de cómo se iba a operar una montaña tan grande.

Tema difícil

Otro tema muy conflictivo que se enfrentaron fue la introducción de aranceles estacionales que pretendía Estados Unidos para proteger a sus productores del sector agrícola, algo que era una de las cosas verdaderamente desventajosas.

En cuanto al acero, se acordó un plazo de siete años para que la industria mexicana se modernice y pueda cumplirse que 70 por ciento de este producto sea fundido y vertido en la región.

Una vez concluida la firma del Protocolo Modificatorio al T-MEC, en conferencia de prensa conjunta con el canciller Marcelo Ebrard Casaubon en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Seade Kuri expresó que en cuanto a plazos de ratificación “la verdad que nosotros no tenemos prisa.

Tenemos un gran interés en que saliera el apoyo de la señora (Nancy) Pelosi (líder de la Cámara de Representantes de Estados Unidos), que saliera el acuerdo entre las facciones diferentes en el esquema norteamericano, indicó.

Por su parte, Ebrard Casaubon informó que la traducción al español del Protocolo Modificatorio será enviado esta misma semana al Senado y será ese órgano el que decida en qué momento lo someterán a votación, pero evidentemente la intención es hacerlo lo más pronto posible.

Ebrard Casaubon prevé que Estados Unidos ratifique el mecanismo trilateral antes del 20 de diciembre. Mientras, Seade Kuri agregó que en Canadá la ratificación es posible que tarde un poco más por motivos internos. Hay apoyo total pero por cómo funciona, puede ser que se vaya a enero.