Con siete horas de retraso, debido a ajustes de última hora, fue reabierto anoche el tramo del Tren Ligero –del estadio Azteca a Tasqueña– que fue sometido a trabajos de rehabilitación durante seis meses y medio, con lo que se reanudó el servicio en toda la ruta.

Con esta renovación se prevé reducir los tiempos de traslado casi 50 por ciento, al pasar de 60 a 35 minutos el recorrido de Tasqueña a Xochimilco, e incrementar de 100 mil a 130 mil el número de pasajeros al día.

La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, afirmó que se tenía una deuda histórica con este medio de transporte, que no se había atendido desde hace muchos años. Se habían hecho mejoras, pero nada más de barniz, pero no se habían hecho mejoras profundas.

Luego de realizar un recorrido a bordo del Tren Ligero desde la estación Ciudad Jardín a la estación El Vergel, la mandataria señaló que se continuará el proceso para mejorarlo a fin de hacerlo más rápido y aumentar 50 mil pasajeros más.

A su vez, el secretario de Movilidad, Andrés Lajous, explicó que desde la época del tranvía no se había dado mantenimiento mayor a las vías del Tren Ligero, por lo que con el paso del tiempo se deterioró el servicio que brindaba a la población.

Guillermo Calderón, director general del Servicio de Transportes Eléctricos, recordó que este tramo presentaba deformaciones y fisuras, entre otros desperfectos, que obligaban a mantener una velocidad inferior a 20 kilómetros por hora, que se incrementará a 60 kilómetros por hora, con una reducción en los tiempos de espera de 10 a cuatro minutos.

Detalló que a lo largo de 5.5 kilómetros se hizo una intervención mayor que consistió en desmontar la vía anterior, demoler la estructura de concreto, renovar el drenaje, mejorar las bases y montar nuevos rieles y durmientes.

Indicó que también se renovó la cromática de algunos trenes y la imagen de las estaciones, así como el sistema de recaudación, para adecuarlo a la nueva tarjeta de movilidad integrada.

Precisó que a estos trabajos se destinaron 310 millones de pesos, y se tiene contemplado un presupuesto de 530 millones de pesos para la intervención del segundo tramo hacia Xochimilco, que iniciaría en el periodo de Semana Santa y concluiría en diciembre.