Lunes 24 de febrero de 2020, p. 24
Managua. Decenas de madres que perdieron a sus hijos en las protestas contra el gobierno del presidente nicaragüense, Daniel Ortega, clamaron ayer por justicia
durante la misa dominical en la Catedral, custodiada por la policía.
Mi hijo va a cumplir dos años de muerto y no se le ha hecho justicia
, gritó llorando Carolina Ramírez, mientras sostenía la fotografía de Marlon, estudiante que falleció de un tiro durante las protestas opositoras en 2018.
El dolor no ha pasado, todos los días lo lloro
, agregó la mujer, quien afirmó que además de la impunidad que rodea la muerte de su hijo, también tiene que sacar su foto a escondidas por temor a la represión que persiste contra los opositores.
Las manifestaciones, que duraron varios meses en 2018, fueron reprimidas con saldo de al menos 328 muertos, cientos de encarcelados y 88 mil exiliados, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
El gobierno de Ortega, en el poder desde hace 13 años, atribuyó el estallido social a un fallido golpe de Estado, y en 2019 aprobó una amnistía que prohíbe investigar a los responsables de la violencia que se dio en las manifestaciones.
Nos han roto el corazón, mi hijo no era vago, ni delincuente como le llaman los seguidores del gobierno
, reclamó Alejandra Rivera, cuyo hijo Daniel murió baleado junto a otros 15 opositores en una de las protestas.
La Iglesia católica, que auxilió a los manifestantes heridos durante el estallido social, ofreció una misa ayer en memoria de los muertos en la Catedral de Managua.
El sacerdote Said Ruiz llamó a los afectados por la violencia a no buscar venganza, sino perdonar y sumarse a la revolución del amor
que promueve el papa Francisco.
La justicia excluye la venganza
, recordó el sacerdote.
Al finalizar la misa, las madres se concentraron en el atrio de la Catedral. Cuando terminaron, varios policías antimotines bloquearon la salida por uno de los portones, incidente que no pasó a mayores.
La oposición anunciará esta semana una coalición para tratar de sacar del poder a Ortega en las elecciones de 2021.