Las afectaciones económicas, el estrés por el encierro, la falta de información dirigida específicamente a los niños y adolescentes son una constante que viven los menores en distintos países de Latinoamérica, en la contingencia sanitaria por el Covid-19.

En una conferencia en línea organizada por el proyecto Tejiendo Redes Infancia, adolescentes de cuatro países expresaron que la pandemia se ha convertido en un reto para ellos, porque sus familias se están viendo afectadas económicamente por el aislamiento y porque les resulta muy complicado adaptarse al encierro.

Juan Martín Pérez García, coordinador de Tejiendo Redes, expresó que es necesario que los estados tomen medidas contemplando el interés superior de la niñez, que representa más de 30 por ciento de la población.

Esmirna, de 17 años, explicó que para ella ser adolescente en la contingencia es un desafío, pues hasta los apoyos económicos del gobierno de su nación, República Dominicana, no están pensados para familias jóvenes.

Keiber, de 19 años, consideró que para los jóvenes en su país, Venezuela, ha resultado difícil mantenerse recluidos por las medidas adoptadas frente a la pandemia

Bryan, de Perú, señaló que las autoridades escolares han optado por saturar de tareas a los jóvenes, pero no toman en cuenta que esto les genera mucho estrés.

Desde Bolivia, Nadia manifestó que para ella y su familia las afectaciones económicas se han convertido en un problema por el aislamiento obligatorio. Vivimos al día y todo lo que teníamos guardado se va acabando.