Los bancos que se enfoquen en atender las necesidades urgentes de sus clientes derivadas de la pandemia por Covid-19 y sean capaces de mantener estables las carteras crediticias serán los que saldrán bien librados de la crisis económica, sostiene un estudio de la consultora estadunidense Bain & Company.

Explica que el brote del nuevo coronavirus ha causado daños en todo el mundo al sector salud y, sobre todo, a la economía de las personas, además de que su duración tiene un alto grado de incertidumbre, pues es altamente dudoso.

Los bancos son una de las pocas industrias consideradas esenciales para mantener las economías lubricadas. Además de desempeñar un papel fundamental para sus clientes y empleados, ayudan a estabilizar los sistemas de préstamos, pagos, comercio y liquidez, detalla el texto.

Indica que los planes de continuidad que han instrumentado diferentes instituciones globales como medidas de respuesta para mitigar la crisis, tienen mérito, pero también se aplican otras acciones particulares a la dinámica de la banca.

Los bancos deben planificar un periodo turbulento, que dure al menos varios meses, con acciones que abarquen toda su huella, física y virtual, y que afecten a todas las partes interesadas.

Al mismo tiempo, puntualiza Bain & Company, los bancos deben poner a prueba sus capacidades y métricas financieras para identificar las implicaciones y oportunidades estratégicas a largo plazo, y construir un puente desde la crisis actual hacia un futuro.

Muchos clientes, ya sean individuos, empresas y otras organizaciones, enfrentan numerosas decisiones financieras y operativas urgentes. Dada la naturaleza de la relación bancaria, necesitan tranquilidad, seguridad y protección. Por tanto, las acciones y comunicaciones de un banco deberían indicar consistencia, estabilidad y razones para confiar en que los servicios continuarán durante la crisis.

Una medida contundente, plantea el estudio, con el fin de ayudar a los clientes, es suspender temporalmente los pagos de préstamos y comisiones en su totalidad. En el caso de los inversionistas, atenderlos también de forma urgente para que persista la confianza.

Bain & Company subraya que, en la medida en que el consumo se debilita, los bancos centrales y los gobiernos se mueven rápidamente para abordar la crisis, pero no todos los bancos serán inmunes y necesitan adoptar medidas mientras haya tiempo, por lo que también se podrían instrumentar medidas de liquidez que aporten a las ganancias y solvencia de las entidades.