La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) construye respiradores artificiales de bajo costo para ayudar a enfermos de Covid-19, con lo que busca ofrecer una oportunidad para los pacientes que no tengan acceso a las máquinas más sofisticadas por la eventual saturación de los servicios de salud.

Debido a que Covid-19 afecta el aparato respiratorio y en sus etapas más críticas los pacientes necesitan recibir asistencia respiratoria con ventiladores médicos complejos, sofisticados y de alto costo, de los que hay pocos en el país, Gustavo Medina Tanco y un grupo de investigadores del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM crearon un ventilador que permite a los médicos salvar vidas.

Lo que estamos tratando de hacer es un ventilador de emergencia, un instrumento mucho más simple de lo que regularmente compraría un hospital, pero que aun así tiene la capacidad de salvar vidas, dijo Medina Tanco.

Aunque no es un instrumento sofisticado, sí logra interactuar con el sistema respiratorio del paciente para enviarle aire, brindando a esos enfermos una oportunidad para vivir en lo que se desocupa una de las máquinas más sofisticadas.

Para ejemplificar la importancia de este aporte, el investigador citó el caso de un médico italiano, quien sólo cuenta con un respirador en su hospital y tiene 10 pacientes; entonces, decide de acuerdo con su criterio quién tiene más probabilidades de vivir para así colocarle la máquina de respiración, mientras los demás pierden la oportunidad de recuperarse.

El académico indicó que en esas situaciones, un ventilador como el de la UNAM puede aumentar los chances de salvar vidas.

El costo aproximado de estos ventiladores es de 300 dólares cada uno, a diferencia de los típicos que cuestan miles de dólares.

Eventualmente, los científicos universitarios buscan obtener una certificación en forma acelerada de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios.

El siguiente paso es la producción, que con la ayuda de empresas socialmente responsables se busca cumplir con todos los requerimientos de los organismos competentes a nivel nacional y de salud para que el instrumento sea autorizado a operar.