Más caro el remedio que la enfermedad
n su presentación diaria sobre la situación del Covid-19 en el estado –siempre por redes sociales–, el gobernador Jaime Bonilla Valdez dijo dudar de la decisión que toma el centro del país de mantener la cuarentena en Baja California hasta el último día de mayo cuando se ha dado cuenta de que las decisiones se toman con datos no actualizados; señaló que al final de día será el gobierno del estado el que determine, sin poner en riesgo la vida de los demás, cómo se va poniendo fin a la campaña quédate en tu casa
porque no se quiere que sea más caro el remedio que la enfermedad
y recordó que en Estados Unidos paró el comercio, pero no la industria manufacturera.
Sin aludir a la polémica nacional provocada por un conductor de noticias de Televisión Azteca, que puso en tela de juicio lo que todos los días dice Hugo López-Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, el gobernador de Baja California, del partido Morena, recordó hoy que el presidente Andrés Manuel López Obrador le ha dicho siempre que cuando se tiene un buen diagnóstico de un problema se tiene 50 por ciento de la solución, y recordó que tiene una relación de mucho afecto con el primer mandatario, pero cuando compara los datos que se divulgan en la Ciudad de México con aquellos que se tienen en Baja California es cuando yo dudo
de las bases que tienen para decir que la entidad tiene que extender
el confinamiento domiciliario hasta el último día de mayo.
En un lenguaje cuidadoso –nunca se le vio en ánimo de confrontar, sólo de dejar en claro lo importante que es para Baja California la industria manufacturera–, Jaime Bonilla dijo que ninguna otra epidemia ha asustado al mundo
como ésta, que el daño económico llevará a que muchas empresas desaparezcan, y se preguntó si los científicos sólo están asustando. Junto con su Secretario de Salud, Oscar Pérez Rico, presentó una tabla estadística de las muchas otras causas por las que muere mucha más gente en el mundo, como tabaquismo, accidentes automovilísticos y cáncer.
Aludió a que la comparación de Baja California es siempre con Estados Unidos, e insistió en que ese país no apagó
la industria manufacturera. Y terminó su alocución con un ¡Viva la libertad de expresión!