San Salvador. Con banderas blancas, salvadoreños y guatemaltecos piden comida en medio de la crisis por el coronavirus, una modalidad que en algunas localidades de Colombia es con lienzos rojos.

Tras 50 días de paro obligatorio por la epidemia, Ana Orellana y sus vecinos colocaron a mediados de mayo una manta blanca en la fachada de su vivienda en uno de los barrios más pobres de San Salvador, en un grito mudo de auxilio por comida.

Cuando se acabaron sus provisiones, ella, como otros, se vio forzada a hurgar entre la basura del mercado más grande del país, pues la venta ambulante de café de la que subsiste ha sido nula desde que el presidente Nayib Bukele ordenó la cuarentena obligatoria el 21 de marzo.

Por eso pusimos la bandera, porque no tenemos ingresos, manifestó Orellana, de 51 años. En realidad necesitamos víveres, subrayó la mujer, quien narró que tampoco tiene los 75 dólares para pagar el alquiler del cuarto en el que vive en el barrio Concepción, en el centro de San Salvador.

El llamado de ayuda por comida con una bandera blanca surgió en la pequeña comunidad Patzún, en la vecina Guatemala, después de quedar aislada por el cerco sanitario impuesto el 5 de abril por el gobierno del presidente Alejandro Giammattei, tras detectarse ahí el primer contagio comunitario de coronavirus.

Los habitantes de Patzún, a 50 kilómetros de la ciudad de Guatemala, colocaron telas blancas afuera de sus casas para dar el mensaje de que necesitaban alimentos, llamado que se extendió por las redes sociales y pronto fue replicado en varias zonas de la capital y del país.

Ahora, en diferentes regiones urbanas y rurales de Guatemala y El Salvador se puede ver cientos de viviendas con señales blancas o rótulos para pedir víveres, o a personas a las orillas de carreteras ondeando banderas en señal de auxilio.

En diversas localidades de Colombia, cuya población tampoco tiene ingresos económicos a raíz del confinamiento obligatorio, la gente cuelga banderas o trapos rojos de sus ventanas y puertas.

En tanto, los contagios del nuevo coronavirus no dan tregua en Chile. Este jueves se informó que en el reporte diario más reciente, cada 32 minutos murió alguna persona. En total se acumularon 49 fallecidos, un incremento de 28 por ciento, lo que llevó el total de decesos a 589, con 3 mil 964 nuevos infectados, informó el Ministerio de Salud. El país tiene un acumulado de 57 mil 581 contagiados en dos meses.

La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, advirtió que algunos países de América Latina han cometido excesos con medidas de emergencia para enfrentar la pandemia, afectando los derechos más básicos de la población. Así lo expresó en una conferencia virtual sobre seguridad en el Hemisferio Occidental, organizada por la Universidad Internacional de Florida. En semanas recientes, algunas organizaciones han señalado a El Salvador de abusos por detener a la gente que rompe la cuarentena obligatoria y enviarlos a reclusión forzada de 30 días. La comisionada declaró que, en algunas naciones de la región, se han incrementado por decreto las atribuciones presidenciales o se ha eliminado o limitado la libertad de movilidad para evitar aglomeraciones, además de que se ha restringido la libertad de expresión o de prensa.

Destacó que si bien la región ya atravesaba por una situación económica y social delicada, se agravarán con el Covid-19 las desi-gualdades, la pobreza, el desempleo, la hambruna y la inseguridad alimentaria, lo cual podría tener como consecuencia un aumento de las protestas sociales, que están siendo reprimidas con fuerza.

Afirmó que si los países y las instituciones internacionales no toman medidas adecuadas para atender las necesidades de la población durante la pandemia, la verdad es que el pronóstico no es bueno.

En tanto, Brasil es ya el tercer país en el mundo más afectado por el Covid-19, según el reporte diario, con 40 por ciento del total mundial dado su registro de 15 mil nuevos contagios y 137 muertos, según datos del Consejo Federal de Enfermería.

América Latina totalizó ayer 32 mil 854 nuevos casos; la mitad corresponden a Brasil, según la Universidad Johns Hopkins.