Medio siglo después: el verdadero 10 de junio
EU: rebelión de la “Generación Y (millennials” y la “Generación Z (centennials)”
Argentina, expropiación estratégica
Por la pandemia, en Lima los venezolanos tienen un empleo que nadie quisiera realizar
A papá
Recuerdos / Empresarios (CXXVIII)
George Floyd y los toros // ¿Qué concepto de espectáculo se quiere preservar?
istóricamente relevante para el desarrollo de las civilizaciones. Esencial para la mayoría de los materiales elaborados por el hombre. Estratégica para el crecimiento. Vital para la fortaleza de la economía. Así suele hablarse de la minería en nuestro país, donde, según la Cámara Minera de México, representa 2.4 del producto interno bruto (PIB) nacional y 8.2 por ciento del PIB industrial. Con frecuencia omite decirse, en cambio, que esa fuente de riqueza y bondades industriales tiene como base una brutal explotación, porque un reducido número de grandes empresas mineras obtienen ganancias desproporcionadas, mientras decenas de miles de trabajadores que hacen posible la extracción de los distintos minerales laboran casi siempre en condiciones de alto riesgo y reciben salarios que apenas alcanzan para subsistir.
Sobre la reactivación de actividades
nte la reactivación gradual de actividades en la capital que comienza el 15 de junio y que establece el uso obligatorio en espacios públicos de equipo de protección personal, sería pertinente que el gobierno de la Ciudad de México, y debido a que hay escasez de estos insumos o están vendiendo los de más baja calidad, promoviera la fabricación casera de cubrebocas y caretas, pero que especificara qué materiales se podrían utilizar para que estos sean funcionales.
l Brasil presidido por el ultraderechista Jair Bolsonaro superó a Gran Bretaña y desde el pasado viernes tiene el segundo mayor número de víctimas fatales del Covid-19. Acorde a los datos conocidos ayer, se llegó a la marca de 42 mil 55 muertos y 832 mil 866 infectados.
a versatilidad del capitalismo no tiene límite, salvo la extinción de la especie y el colapso del planeta. Pero mientras esto sucede, sus cambios se aceleran en busca de una mayor tasa de explotación e incremento de beneficios. Si la lucha por la apropiación del plusvalor es una de las características de la contradicción capital-trabajo, hoy nos enfrentamos a una reinvención de las formas de dominación, enajenación del excedente y construcción de hegemonía. El capitalismo digital se pone al día utilizando las nuevas tecnologías bajo la pandemia del Covid-19. Si hacemos historia, es un proceso similar al sufrido por el capitalismo histórico entre los siglos XVI y XVIII, donde la proto-industrialización y los descubrimientos científicos aceleraron el proceso de acumulación de capital y la revolución industrial. Sus fases van desde el capitalismo colonial, la esclavitud hasta el imperialismo y la consolidación de la dependencia industrial, tecnológica y financiera. Sin embargo, su evolución ha tenido reveses. Los proyectos emancipadores anticapitalistas han trastocado sus planes, aunque sea de forma momentánea. Las luchas de resistencia, los procesos revolucionarios y los movimientos populares han alterado su itinerario, obligándolo a retroceder. El siglo XX ha dejado una huella difícil de borrar en su desarrollo. Fueron dos guerras mundiales, seguido del holocausto nuclear no exento de conspiraciones, golpes de estado y procesos desestabilizadores cuyos efectos los reconocemos en un crecimiento exponencial de la desigualdad, el hambre, la miseria y la sobrexplotación de un tercio de la población mundial. En este recorrido, el fascismo, eje de la modernidad, se proyecta en el siglo XXI. El neoliberalismo asume sus principios y los gobernantes adoptan sus proclamas bajo un llamado a la xenofobia, el racismo y el discurso anticomunista. Como señaló George Mosse en su ensayo La nacionalización de las masas, Hitler y el nazismo se explican bajo un simbolismo, una liturgia y una estética que atrapó a la población bajo el culto al pueblo. Una nueva política que atrajo no sólo a los nacionalsocialistas, también a miembros de otros movimientos que encontraban su estilo atractivo y útil para sus propios propósitos
. Léase Trump, Bolsonaro, Piñera o Duque.
a política democrática, la que nos refiere a la deliberación y confrontación de visiones y programas de acción sobre la realidad, entró en receso desde el martes pasado, cuando el Presidente inventó un conflicto fundamental que de principio a fin cierra toda posibilidad de despliegue a un ejercicio democrático propiamente dicho. El encierro brincó el cerco sanitario y se ha convertido en amenaza que afecta con contagiar más nuestros entendimientos y poner en peligro nuestras capacidades de comprensión de una coyuntura tenebrosa, que cada día marca con hierro el mapa de nuestras posibilidades futuras.
pocos días de la llegada de los buques tanque a Venezuela, los resultados ya están a la vista. En este país el abasto de gasolina se traduce en la disminución de las interminables filas.
oncluyamos esta serie de comentarios sobre la marcha de la economía con la presentación de los datos reales de los llamados retiros de electricidad de las zonas de carga del país
. Son los datos más recientes del Centro Nacional de Control de Energía (Cenace).
no de los lugares donde se puede producir magia, entendida de manera simple como la transformación de algo en otra cosa sorprendente, es la cocina. Una de las actividades que me han resultado más satisfactorias durante el encierro que padecemos es cocinar.
e voy a permitir transcribir literalmente el artículo de Clarisa Landázuri que aparece en el ejemplar de La Voz Brava que esta mañana recogí debajo de la puerta de mi casa. Externaré que llevé a cabo mi lectura inmediatamente, y que, a medida que progresaba en ella, y a tono con la escritura automática de la autora, diré que la hice de un tirón.
L
os cinco sangres no mueren, sólo se multiplican
. Cinco sangres (Da 5 Bloods), el largometraje más reciente del afroestadunidense Spike Lee (Haz lo correcto, El infiltrado del KkKlan), comienza, de modo característico en el realizador, con un oportuno recuento histórico del abuso y el estigma social que ha padecido la comunidad negra en Estados Unidos. Esta irrupción de imágenes propias de un documental en una cinta de aventuras que combina la comedia y el drama bélico, permite documentar muy bien el naufragio moral de una generación de antiguos combatientes afroestadunidenses en la guerra de Vietnam que en su regreso sin gloria al país natal sólo descubrieron el desdén o el oprobio y la certeza de haber peleado una guerra inmoral ajena y por derechos que nunca habían sido ni podrían llegar a ser suyos. Spike Lee recuerda la numeralia de la desigualdad racista: a finales de los años 60, la población afroestadunidense representaba 11 por ciento del total en ese país, pero en la guerra de Vietnam esa comunidad constituyó 32 por ciento de las tropas en combate. Las promesas de libertad y reconocimiento igualitario se tradujeron, en las cinco décadas siguientes, en la persistencia de una brutalidad policiaca de la que el cineasta ha sido cronista fiel y que hoy anima la reivindicación social del Black Lives Matter.