Del 2014 al 17 de mayo de 2020, el Observatorio Nacional de Crí-menes de Odio contra Personas LGBT ha documentado 209 asesinatos en sólo 10 estados de la Re-pública, entre ellos destaca Veracruz (49), Chihuahua (37) y Michoacán (28). En la presentación del informe elaborado por organizaciones civiles, expuso que las más afectadas son las personas transexuales (44.5 por ciento), seguidas de los hombres gays (40.7 por ciento) y en menor porcentaje lesbianas, hombres trans y perso-nas bisexuales.

De los crímenes, 39.75 por ciento se perpetraron en espacios públicos, 38.52 por ciento en la casa de la víctima y 9.94 por ciento en bares o antros, hoteles y lugares de encuentros. Las principales causas de muerte fueron por impactos de bala y arma blanca; le siguen los golpes y asfixia.

Las entidades restantes que fueron contempladas en este informe son Guerrero, con 22 asesinatos, Puebla, 18; Coahuila, 14; Ciudad de México, 13; Nuevo León, 12; Jalisco, 10, y Baja California, 6. En cuanto a la edad de las víctimas, cerca de 58 por ciento tenía menos de 40 años.

En el documento, presentado ayer por Gloria Careaga, coordinadora de Fundación Arcoíris, y Natalia Lane, del Centro de Apoyo a las Identidades Trans, se reportó que de la totalidad de crímenes de odio, en 40.7 por ciento se desconoce si hay alguna persona detenida y sólo en 31.5 por ciento hay alguien encarcelado.

En su participación, Sara Irene Herrerías, fiscal especializada en materia de derechos humanos de la Fiscalía General de la República (FGR), mencionó que junto con otras dependencias trabajan en la construcción de un código nacional penal en el que están contemplados los delitos de odio para evitar la impunidad de los casos.

Víctor Madrigal-Borloz, experto independiente sobre orientación sexual e identidad de género de Naciones Unidas, instó a las entidades estatales a que recojan la información presentada por el observatorio y la integren a sus análisis de política pública y a los sistemas de recabo de información y estadística.

Pedro Paradiso Sottile, director ejecutivo de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex para América Latina y el Caribe, señaló que la violencia contra las personas de la diversidad sexual está promovida por los discursos de odio y antiderechos, que mucho tiene que ver con el fundamentalismo político, religioso, cultural y social.