De 4 mil 210 sitios de agua superficiales (cauces, arroyos y lagos) 59 por ciento tiene algún problema de calidad del líquido. Contienen materia orgánica u otras sustancias 30 por ciento, mientras otro 29 por ciento presenta coliformes fecales, sólidos suspendidos o carencia de oxígeno, lo cual es un problema para la vida acuática, sostuvo Blanca Jiménez, directora de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Explicó que el agua se monitorea no sólo para consumo humano, sino que se vigilan los parámetros para los diferentes usos, como el riego y la vida acuática. Los principales contaminantes que hay son el arsénico y coliformes fecales, en algunos sitios también fluor y problemas de dureza del líquido, lo cual puede afectar la infraestructura.

El arsénico y el fluor se han encontrado en zonas del norte del país, como en Aguascalientes, explicó en entrevista.

Indicó que hay 629 pozos que son fuentes de abastecimiento de agua, de los cuales 98 tienen problemas con arsénico y 127 con fluoruro. Hay que decir que no necesariamente la región está contaminada, en La Paz (Baja California Sur) hay 32 pozos, de los cuales 29 están bien y tres tienen un problema de arsénico. Esto tiene que ver con el suelo.

Descargas e inspecciones

A través de la Red Nacional de Vigilancia de los Cuerpos de Agua se realizan cada año, en promedio, 18 mil 500 inspecciones, de las cuales se obtienen más de un millón 35 mil resultados. Todos ellos se dan a conocer en línea, aunque para un ciudadano es difícil saber sobre el tema y se trabaja para hacer la información más accesible, dijo.

En relación con las descargas de aguas residuales durante 2019, se atendió el rezago de actas de inspección no calificadas de administraciones anteriores y se calificaron 98 por ciento. Durante 2020 se han realizado 616 inspecciones por denuncias ciudadanas y se calificaron 73 por ciento de las actas.

Destacan el derrame de jales de la presa industrial Minera Raya, en Canelas, Durango, y el de la bahía de Acapulco, Guerrero, que derivaron en denuncias penales, así como un operativo en la huasteca de San Luis Potosí por la cual se levantó un acta administrativa al organismo operador en Ciudad Valles por descargas residuales sin tratar. Explicó que ahora se inspecciona a los mayores usuarios de agua.

En el caso de ríos altamente contaminados, como el Lerma, en el estado de México, o el Santiago, en Jalisco, dijo que en ellos hay presencia de materia orgánica y las acciones deben ser de saneamiento, ya que en muchas de ellas hay descargas municipales. Debido a que es una atribución local, en ese nivel de gobierno se debe tratar el agua, y si cancelamos la descarga debemos cesar la entrada del líquido a la ciudad, pero es un gran reto, porque se trata de un derecho humano.

En relación con el agua potable contaminada en centenas de municipios, según reportó La Jornada hace unas semanas ( bit.ly/3auIMER), dijo que debido a que la calidad del suministro del líquido depende de Cofepris, se presentará una respuesta conjunta.