Bogotá. Decenas de miles de indígenas, estudiantes, profesores, miembros de organizaciones sociales y sindicales de Colombia participaron ayer en una jornada de protesta en las principales ciudades del país contra las políticas del gobierno del presidente Iván Duque, el asesinato de líderes sociales y los recientes abusos policiales.

Las marchas forman parte de una serie de protestas que comenzaron a finales del año pasado, incluidas las manifestaciones de septiembre contra la brutalidad policial que dejaron 13 muertos, además de incendios de autobuses y estaciones de policía.

El gobierno advirtió que las multitudes crean mayor riesgo de contagio de Covid-19. Colombia, pese a que se mantuvo más de cinco meses en aislamiento obligatorio, está a punto de superar un millón de infecciones confirmadas.

Los manifestantes demandan el cumplimiento de un extenso pliego petitorio que incluye la solicitud de una renta básica para trabajadores que perdieron sus empleos por la pandemia, la financiación del sistema de salud, un plan de apoyo a la educación y acciones para que cesen los feminicidios y agresiones contra ex guerrilleros.

Los líderes de organizaciones civiles y sindicatos exigen un encuentro con Duque que permita acordar acciones para poner fin a los asesinatos de líderes sociales.

Los manifestantes se congregaron en la Plaza Bolívar, en el centro de la capital.

Unos 10 mil indígenas que participan en una protesta masiva conocida como minga llegaron el domingo a Bogotá procedentes de Cali con la exigencia de una reunión con Duque, que el mandatario no aceptó, por lo que decidieron regresar a sus lugares de origen, para desde ahí continuar su lucha por el cumplimiento de los acuerdos de paz firmados con la desarticulada guerrilla de las FARC y el cese de la violencia en sus territorios.