Viernes 13 de noviembre de 2020, p. 22
En respuesta a las recientes presiones inflacionarias, en particular en los precios de alimentos, la junta de gobierno del Banco de México (BdeM) decidió por mayoría mantener en 4.25 por ciento la tasa de interés de referencia.
La decisión marcó una pausa en el ciclo de baja en las tasas del banco central –que son las que determinan el costo de los créditos de empresas y personas–, que había sido constante en las pasadas 11 reuniones de política monetaria. Cuando se inició el ciclo bajista interrumpido ayer, la tasa era de 8 por ciento.
Una menor tasa de interés genera incentivos a la actividad, al reducir el costo de financiamiento para la inversión de las empresas y el consumo de las familias.
El banco central consideró que después de una profunda contracción en el segundo trimestre, la actividad económica en México mostró una recuperación en el tercero, si bien permanece por debajo de los niveles previos a la pandemia, en un entorno de incertidumbre y riesgos
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Convergencia hasta junio
La pausa en el descenso de la tasa de interés brinda el espacio necesario para confirmar una trayectoria convergente de la inflación a la meta, que es de 3 por ciento más o menos un punto porcentual, dijo.
En los últimos tres meses la inflación estuvo fuera del objetivo del banco central: 4.05 por ciento en agosto, 4.01 en septiembre y 4.09 en octubre.
Ese incremento de 4.01 a 4.09 por ciento entre septiembre y octubre pasados, refleja un incremento del componente no subyacente (que no incluye los productos con precios más vólatiles), donde destacan los aumentos en los precios de las frutas y verduras, mencionó.
Aunque la pausa implica una intención de reactivar los recortes, será importante conocer el contenido de la minuta para saber los lineamientos que los miembros considerarán para completar el ciclo, pues la inflación se mantendrá fuera del objetivo hasta junio de 2021, consideró Marcos Daniel Arias Novelo, analista de Grupo Financiero Monex.