Viernes 13 de noviembre de 2020, p. 22
Las secretarías de Economía y de Agricultura y Desarrollo Rural informaron que no existe justificación para un incremento de entre uno y dos pesos en el precio del kilogramo de la tortilla, que fue anunciado por representantes del sector esta semana.
En un comunicado conjunto, explicaron que no hay desabasto o presiones inflacionarias en los eslabones de la cadena productiva que justifiquen un incremento en el precio.
En este sentido, señalaron que las recientes expresiones de empresas y personas sobre supuestos aumentos podrían constituir violaciones a la Ley Federal de Protección al Consumidor y a la Ley Federal de Competencia Económica.
El lunes pasado, La Jornada adelantó que el Consejo Nacional de la Tortilla tiene pensado elevar en uno a dos pesos el kilogramo de la tortilla, con el argumento de un incremento de los costos de los insumos, sobre todo de la harina. (https://bit.ly/2GVdYmg)
Las dependencias informaron ayer que realizan un monitoreo permanente de la estructura de costos de todos los eslabones del conjunto de la cadena productiva maíz grano-masa-harina-tortilla, de tal manera que se analizan minuciosamente los costos de energía, combustible, transporte, empaque, mano de obra y otros.
Lo anterior, con el fin de descartar aumentos injustificados en los insumos que pudieran impactar en el precio final de la tortilla y lesionar el bienestar de las familias, en particular de aquellas con menores ingresos.
Las cosechas del ciclo agrícola primavera-verano registran una producción favorable, por lo que hay disponibilidad del grano y, actualmente, el precio del maíz se ubica en alrededor de 4 mil 700 pesos por tonelada al productor, y de 5 mil 450 pesos por tonelada en molino, lo que permite un funcionamiento adecuado de la cadena productiva.
Destacaron que con los parámetros de abasto, costos y precios, el precio de la tortilla debería mantenerse sin cambio, por lo menos hasta mediados del siguiente año, cuando se tendrá información sobre las cosechas del maíz grano del ciclo agrícola otoño-invierno 2020/2021.