Lunes 30 de noviembre de 2020, p. 4
Con un juego tibio, sin arriesgar y dejando dudas, Pumas empató 0-0 (global 1-0) frente a Pachuca, que le fue suficiente para avanzar a la semifinal del Torneo Guardianes 2020, instancia a la que no había accedido desde hace dos años.
Pachuca fue más ofensivo en la primera parte, pero la mala dirección de sus arietes y el arquero Julio González, quien suple al lesionado Alfredo Talavera, evitaron el anhelado gol. Los felinos se mostraron lejos de la versión aguerrida con la que destacaron en la fase regular y sólo despertaron por momentos en el complemento, aunque apenas se acercaron a la meta.
Pese a la pandemia de Covid-19 y el aumento de hospitalizaciones por el virus en la ciudad, decenas de aficionados de Pumas recibieron al plantel en el estadio Olímpico Universitario con una caravana entre banderas, tambores y cánticos, aunque se olvidaron de las medidas sanitarias.
Ya en el terreno de juego, los felinos no pudieron tener a causa de una lesión a Favio Álvarez, quien marcó el gol en el duelo de ida. Tampoco los acompañó en el banquillo el auxiliar técnico Israel López, quien ha sido clave como respaldo del estratega Andrés Lillini.
Frente a un Pumas que apostó por el contragolpe, los Tuzos pusieron tensión en varias ocasiones, aunque se toparon con la muralla de Julio González. La jugada más clara fue cuando Víctor Dávila remató con una volea, pero el esférico pegó en el poste.
Mientras Paulo Pezzolano, timonel de los hidalguenses, lanzaba órdenes para que su equipo se mantuviera con la misma tónica, Andrés Lillini daba vueltas en el área técnica, en silencio.
Al término, Lillini reconoció que no me gustó acabar el partido de esta manera
, pero reconoció el trabajo del guardameta González al mantener el marcador en cero
. Dijo estar seguro de que su plantel llegará a la final, pero debemos mejorar, no somos conformistas
.