Nadie tiene asegurado el triunfo en la contienda de 2024, aseguró el presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova, durante una exposición en defensa de las reglas actuales de competencia política.

Frente a integrantes de la Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México, subrayó que una reforma electoral de tipo fundacional, como la que propone el Presidente de la República, no es necesaria ni pertinente. Rechazó también las mentiras divulgadas respecto de la operación del actual sistema comicial.

Quién ganará, única duda

En cuanto a las alternativas de cambio, puntualizó que en el Congreso de la Unión hay 743 iniciativas de reforma legal o constitucional en materia electoral. De prosperar una reforma de gran calado, señaló, el margen de cambios posteriores, se cerraría en mayo próximo, porque en septiembre de ese año empieza formalmente el proceso 2024, explicó.

Luego enumeró aspectos de las anteriores modificaciones, aplicadas desde los años 70, y su impacto en las elecciones venideras, como aumentar el ya de por sí alto porcentaje de alternancia en el poder, y la cobertura de casi 100 por ciento del padrón.

“Hoy el país está cruzado por una profunda pluralidad, igual que nuestra sociedad, y nadie tiene el triunfo asegurado. Para decirlo en una frase: si algo caracterizaba a nuestro sistema electoral hace 35 años, apenas es que no había certeza en las reglas del juego y en el arbitraje de la política; la única certeza que había era quién iba a ganar.

“Hoy estamos en las antípodas: las reglas y la actuación de las autoridades son ciertas –podemos estar de acuerdo o no, por eso están las instancias para impugnar– y la única sana incertidumbre, como debe ocurrir en democracia, es quién va a ganar las elecciones”. Adujo que antes los comicios eran el principal problema del país, por lo que sería lamentable que una reforma haga volver a esos tiempos.