En dos años recientes al menos 219 esudiantes de normales rurales han sido detenidos y 165 procesados penalmente, principalmente de Tiripetío, Cherán, Ayotzinapa, Amilcingo y Teteles, afirmó Miriam Estrada, secretaria general de la Confederación de Estudiantes de México.

En conferencia de prensa, dijo que los procesos judiciales e investigaciones ministeriales son consecuencia de protestas que, en su mayoría, fueron hechas por solicitar un diálogo con las autoridades o el cumplimiento de acuerdos ya suscritos para mejorar o construir instalaciones, además del otorgamiento de más presupuesto, becas, evaluaciones adecuadas y el respeto a la organización estudiantil.

Dichos actos implican violaciones a los derechos humanos, al debido proceso, presunción de inocencia, asociación, manifestación pública, protesta, integridad y seguridad personales, educación, entre otros.

En el acto, representantes de algunas normales del país expresaron que a un siglo de la fundación de la primera escuela rural para formar maestros, el 22 de mayo de 1922 en Tacámbaro, Michoacán –cuyas instalaciones ahora se ubican en Tiripetío–, el Estado mexicano tiene una deuda histórica pendiente.

Nos pronunciamos porque los gobiernos federal y estatales respeten y brinden garantías concretas al modelo educativo del normalismo rural. Aunque en el presente sexenio, discursivamente y en la Constitución se reconoce la importancia del magisterio, en los hechos se ha promovido el desmantelamiento de las normales rurales.

Reiteraron que tras las manifestaciones públicas entre el 27 de mayo de 2020 al 14 de febrero de 2022, el Centro de Derechos Humanos José Revueltas documentó la detención arbitraria de 219 estudiantes. En ese mismo periodo, 165 normalistas rurales han estado o continúan bajo proceso penal y 68 han sido relacionados con carpetas de investigación.

Agregaron que es preocupante que desde los gobiernos federal y estatales se pretenda debilitar paulatinamente o desconocer a los comités y consejos que conforman la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, además por dividir a sus bases impulsando la denominada matrícula externa, es decir, alumnos que no cumplen con el perfil de ingreso y permanencia de un normalista rural, el cual se compone de cinco ejes: académico, político, cultural, deportivo y de módulos de producción.

Comentaron que es indispensable modificar los criterios del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros, en el que se incluya el otorgamiento de plazas automáticas para los egresados de normales rurales, quienes acudirán a enseñar a comunidades campesinas, indígenas o de trabajadores.