Tierra firme es un montaje cuyo propósito es dar voz a niñas y niños ante situación de riesgo; de motivarlos a que hablen sobre cualquier tema que los incomode y que cuando necesiten ayuda se atrevan a pedirla, señaló el colectivo Teatro Espejo, que en coproducción con 4 Búhos Teatro, estrenó la puesta en el recinto María Tereza Montoya.

Mel Fuentes, a cargo de la dramaturgia junto con Jessica Lunet, señala que la obra busca que los niños puedan expresarse, además de ser un llamado para que los adultos sean conscientes de escuchar esa voz, de darle la importancia que merece.

Agregó que el proyecto surgió durante la pandemia, cuando se reunió con sus compañeras y se preguntaron por qué no recordaban muchos aspectos de su infancia, situación que las motivó a hacer un ejecicio con el fin de rescatar esas memorias de su infancia que creían enterradas y traerlas al presente, fue algo muy conmovedor.

Por su parte, Miguel Jiménez, director de la puesta en escena, indicó que se trata de una propuesta a fin de que los niños sepan cómo pedir ayuda, porque en muchas ocasiones llevamos con nosotros huellas de dolor que nos hacen actuar de cierta forma toda la vida, no nos damos cuenta de que ahí hay un niño o una niña heridos.

Tierra firme se presenta en el teatro María Tereza Montoya, con funciones los sábados y domingos a las 13 horas. El 2 y 3 (cuando concluirá temporada) de julio habrá función doble (13 y 15 horas).