La poesía ralentiza un poco la realidad, asevera Luis Arce
El escritor habla en entrevista de Improvisación sobre motivo, su primer libro, publicado por la editorial independiente Juan Malasuerte
Viernes 20 de enero de 2023, p. 5
La poesía de Luis Arce discurre sobre la velocidad y la aceleración de la ciudad, de lo imposible que es de pronto vivir en ella. Al mismo tiempo hace un contrapunto en el momento de levantar la mirada, y de pronto lo único que se puede encontrar es un hueco del cielo, comenta con motivo de la publicación de su primer libro, Improvisación sobre motivo (Juan Malasuerte). La poesía, en última instancia, verdaderamente tiene esta cualidad de ralentizar un poco la realidad. Eso me provoca
, declara.
Ya nadie entiende el cielo de las ciudades
, lanza el autor casi desde el inicio, en su segundo poema de improvisación. En entrevista, apunta que aunque no es partidario del tema como eje rector principal de un libro, es verdad que la ciudad está presente todo el tiempo, porque al final muchas de las cotidianidades que nos afectan y nos transforman ya no son perceptibles
, recalca sobre estos episodios en los que abundan los vehículos y los transeúntes.
Sin embargo, el cielo en las urbes, sitiado por un montón de edificios, emerge entre la aceleración y el ruido. Me parece que es al final una imagen que nos ayuda a entender quizá la situación en la que estamos y cómo el lenguaje puede articular un discurso potente a partir de ese desentendimiento
.
De pronto había un libro
El conjunto de palabras que integran el poemario de Luis Arce (Ciudad de México, 1989), manifiesta, las estuve escribiendo durante algunos años. Nunca lo pensé como un proyecto de libro
. La idea apareció después de su acercamiento con la editorial independiente Juan Malasuerte, así como del poeta y editor Francisco Fentón. El poemario estará a la venta en la librería Escandalar, ubicada en Bajío 53, colonia Roma Sur.
Hay muchas ideas que surgen como chispazos de esas observaciones
, aunque sostiene: No soy tan partidario de que el poema te hable al oído y descienda por tu pluma hacia el cuaderno o computadora. Sí creo que hay un trabajo intelectual, cognitivo, de persistencia a la hora de escribir un texto. Pero particularmente sí es cierto que muchas de estas cotidianidades sí me despertaban mucho esta inquietud de poder hacerlas más visibles para mí y para aquellos que las leyeran. Por eso aparecen cosas de la cotidianidad que de pronto pueden ser todo menos poéticos, como papel de baño con aroma o un calendario
.
Luis Arce considera que estas pequeñas editoriales, como Juan Malasuerte, suponen un espacio de resistencia, no sólo en cuanto a las palabras, sino al fenómeno de la lectura de esta desaceleración. En su opinión, la poesía es un género lento, no es de consumo tan inmediato. Ese tipo de libros trabajan a una velocidad distinta de la impuesta por el mercado.
“La labor que han venido realizando todas estas editoriales, no sólo en México, sino en toda Latinoamérica, me parece que es probablemente la más fundamental de una preservación de formas distintas de entendernos con el lenguaje, como es la literatura que pertenece más al ámbito del mercado, de las grandes editoriales, tiene aspectos muy definidos y objetivos muy claros.
En las editoriales independientes muchas de estas escrituras periféricas han encontrado una casa que les es mucho más propia en montones de sentidos, porque justo deja más ámbito para el misterio, para lo que no se puede nombrar.