El gobierno federal debe obligar al dueño de Grupo México, Germán Larrea, a erogar los 20 mil 500 millones de pesos que fijó la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para remediar los efectos del derrame de sustancias altamente tóxicas de su planta productora de cobre de Cananea al río Sonora, toda vez que a nueve años de esa que es una de las mayores tragedias ecológicas, el empresario pretende seguir en la impunidad, advirtió el senador de Morena, Napoleón Gómez Urrutia.

En entrevista, resaltó que es muy importante la investigación realizada por la Semarnat, ya que encontró que persiste la contaminación en el río Sonora y sus afluentes e incluso en el aire, donde hay polvillo de los metales pesados derramados el 6 de agosto de 2014 y establece que Grupo México no cumplió con su responsabilidad de resarcir el daño humanitario y ambiental. Por ello, ahora lo que se necesita es que el gobierno actúe.

Que aplique todo el peso de la ley, y “si es necesario que alguien vaya a la cárcel, que se haga, pero basta ya de que Grupo México siga pasando por encima de los derechos de los trabajadores, de los habitantes de las comunidades en que se asientan sus minas, como es el caso de Cananea. Eso lo hizo con la complicidad de los gobiernos del PRI y el PAN, pero no en la 4T.

El dirigente nacional del Sindicato Minero recordó que a fines del sexenio de Enrique Peña Nieto se cerró el expediente por el derrame de 40 mil metros cúbicos de desechos altamente tóxicos de una de las represas de la mina de Cananea –a la que renombró como Buenavista del Cobre–, y el magnate fue exonerado y se le permitió liquidar el fideicomiso que abrió en 2014, con 2 mil millones de pesos, supuestamente para remediar los efectos en la salud y el medio ambiente.

Sin embargo, agregó, el presidente López Obrador decidió al inicio de su gobierno reabrir el caso y la Semarnat establece ahora que el daño persiste y Grupo México debe resolverlo e invertir los 20 mil 500 millones de pesos.

La respuesta inmediata de Grupo México, expuso el senador Gómez Urrutia, ha sido rechazarlo, pese a que especialistas documentaron 800 casos de niños, adultos y ancianos con cáncer y el hecho innegable de que el magnate ha condenado a morir lentamente a las personas que habitan en seis municipios irrigados por el río Sonora. La agricultura y la ganadería se desplomaron porque los cultivos están contaminados.

El Presidente de la República debe poner un alto a ello y obligar a Larrea a que cumpla con su responsabilidad social. El propio Ejecutivo federal ha expresado que tiene 330 concesiones mineras, de agua, de ferrocarriles y otros rubros, lo que le ha permitido acumular una riqueza enorme, a base de explotar de forma irracional los recursos humanos y el medio ambiente.

Si se permite que siga impune, que no pague el costo de ese derrame al río Sonora, producto de su negligencia, de no invertir en seguridad industrial, va a seguir jugando con la vida de los trabajadores, de los pobladores de los municipios en que están sus empresas.

El senador Gómez Urrutia recalcó: Ya dieron el paso más importante, que se siente un precedente y aunque se trate de uno de los hombres más ricos del país, que se le haga cumplir la ley. Con ello se pondría un ejemplo a todas las empresas del país y se sentará un precedente, a fin de que tragedias como ese derrame no vuelvan a ocurrir jamás.