Chihuahua, Chih., La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza estadunidense (CBP, por sus siglas en inglés) advirtió sobre la llegada de cientos de migrantes, en su mayoría de origen venezolano, quienes atravesaron de manera irregular el río Bravo en el lugar conocido como puerta 36, entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas, luego de que el viernes cruzaron el agua helada más de 150 personas, incluidas familias con niños, cuando la región registra temperaturas por debajo de cero grados.

Los agentes de la Patrulla Fronteriza detectaron a grupos de personas en situación de movilidad que llegaban constantemente al área fronteriza cerca del marcador de la Iniciativa de Seguridad Fronteriza (BSI) 36, informó la CBP en un comunicado.

El sector de El Paso advirtió a los indocumentados que no escuchen la información errónea que circulan organizaciones criminales trasnacionales, y amenazó con sancionar a los extranjeros que busquen cruzar la frontera. Las personas y familias que intenten ingresar a Estados Unidos sin autorización y que no puedan establecer una base legal para permanecer en dicho país serán expulsadas y estarán sujetas a una prohibición mínima de reingreso de cinco años, así como a un posible proceso penal.

Entre el miércoles y el jueves de esta semana, alrededor de mil extranjeros, la mayoría familias, llegaron a Ciudad Juárez en un tren de carga, y este sábado arribaron otros cien en los vagones de un convoy que se detuvo a la altura de la glorieta kilómetro 20, desde donde caminaron hasta el río Bravo.

El jueves, 150 personas estuvieron formadas en la puerta 36, que se ubica frente al cruce del bulevar Juan Pablo II y avenida Antonio J. Bermúdez de Ciudad Juárez; el viernes la fila aumentó a más de 500 y la madrugada del sábado había decenas en espera de entregarse a los agentes de la Patrulla Fronteriza para pedir asilo.