Jueves 28 de diciembre de 2023, p. 25
La mayoría de los migrantes que permanecen en la Plaza Giordano Bruno, en la colonia Juárez, padecen enfermedades de las vías respiratorias al estar expuestos a las bajas temperaturas de la temporada invernal y a las lluvias, porque no alcanzan a protegerse con las casas de campaña, aseguró el profesor de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México, Arturo Ortiz.
A las afecciones físicas, entre las que también se encuentran cuadros médicos de anemia, males gastrointestinales, dermatitis y crónico degenerativos como la hipertensión, se suman los problemas sicológicos como ansiedad y depresión, por lo que el académico se manifestó a favor de que instituciones educativas, el gobierno federal o local impulsen brigadas de voluntarios especialistas que atiendan a los extranjeros.
Entrevistado en ese lugar donde hay unas 100 casas de campaña, indicó que la mayoría de los migrantes están desde al menos hace dos meses procedentes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Guatemala, entre otros países, y que difícilmente los especialistas van porque no recibirán un pago por sus servicios.
Alertó que hay 30 niños y la persona de mayor edad es Kibidan, una mujer de 68 años, quien padece anemia, hipertensión y ha tenido taquicardias, así como una joven con cuatro meses de embarazo sin que lleve hasta el momento un seguimiento médico.
El sicólogo comentó que he pasado la charola entre mis conocidos para traer alimentos no perecederos como frijol, sopa y arroz, galletas, algo de ropa y zapatos
, además de que el pasado 24 de diciembre acudió al mercado Juárez acompañado de algunos migrantes para comprar una piñata y fruta.
Mencionó que es necesario que la gente se solidarice con los migrantes, quienes han perdido su cultura, lugar de origen, sus familiares y, en su caso, propiedades como casas, animales y otros bienes.
Se busca que tengan condiciones humanitarias
En tanto, el jefe de Gobierno, Martí Batres, señaló que su administración busca que los migrantes tengan las condiciones humanitarias adecuadas durante su estancia en la capital, pero con el cuidado que eso no signifique que podamos incorporar de manera indefinida a la vida cotidiana de la ciudad a todos los que llegan
.
Comentó que se trabaja en coordinación con las autoridades federales en la atención a ese fenómeno, pero remarcó que la mayoría de los que piden estatus de refugiados no cumplen con las condiciones para obtenerlo, es decir, ser víctimas de persecución política o religiosa.
Admitió que hay migrantes que han encontrado trabajo, por lo que se debe revisar si las condiciones laborales que se les ofrecen son respetuosas de sus derechos.
Buscamos lo justo, sobre todo atendiendo los derechos de los migrantes; pero también no olvidar los derechos de los vecinos, habitantes de la Ciudad de México.