Viernes 29 de diciembre de 2023, p. 4
El Tren Maya, importante proyecto de desarrollo que inició operaciones recientemente, implicó descubrimientos arqueológicos y el mejoramiento del acceso al conocimiento de ese ancestral pueblo, así como el crecimiento del acceso a la riqueza cultural y natural del país.
A la par de la magna obra de infraestructura de transporte, se realizó el salvamento arqueológico en su trazo, se construyeron instalaciones que apoyan la visita a sitios arqueológicos y trabajos que permitan la apertura de dos de ellos: Ichkabal y Paamul II.
El pasado 15 de diciembre arrancó el tren en su tramo de Campeche a Cancún. El 31 de este mes extenderá su funcionamiento hasta Palenque, Chiapas. Al finalizar la iniciativa de transporte ferroviario recorrerá mil 554 kilómetros a lo largo de las entidades de Chiapas, Campeche, Tabasco, Yucatán y Quintana Roo.
En la primera parte se hallan 14 estaciones: San Francisco Campeche, Tenabo, Hecelchakán, Calkiní, Maxcanú, Umán, Teya, Tixkokob, Izamal, Chichén Itzá, Valladolid, Nuevo Xcán, Leona Vicario y Cancún Aeropuerto.
Como ejemplo de la oferta cultural de los espacios vinculados con este tramo ya abierto, en las cercanías de las primeras dos paradas mencionadas se hallan la ciudad de Campeche, la Reserva de la Biosfera Los Petenes y la zona arqueológica de Kankí. Las estaciones Hecelchakán y Calkiní están próximas a la zona arqueológica de Xcalumkín, la Isla de Jaina y el Parque Nuevo Uxmal.
Desde el resto de los puntos del Tren Maya ahora activos se puede llegar a sitios tan importantes como los pueblos mágicos de Sisal, Izamal, Valladolid e Isla Mujeres; la Reserva de la Biosfera Ría Celestún; los parques nacionales de Costa Occidental de Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc, y el de Isla Contoy; la Ruta Puuc; las ciudades de Mérida y Cancún y las zonas arqueológicas de Dzibilchaltún, Chichén Itzá y Ek’Balam.
La operación de las estaciones Palenque, Boca del Cerro, Tenosique El Triunfo y Candelaria, que iniciará el último día de este año, facilitará el acceso a las zonas arqueológicas de Palenque (Chiapas), Pomoná y Moral-Reforma (Tabasco) y El Tigre (Campeche), así como el pueblo mágico y la reserva nacional de Palenque y el área natural protegida Wanha (río de las Codornices).
En un recorrido que realizó La Jornada (20, 21 y 22 de noviembre de 2023) en los sitios de Palenque, Moral-Reforma y El Tigre, atestiguó los trabajos recientes de investigación y de mejoramiento de la infraestructura para atender a los visitantes, cuyo incremento ya estaba ocurriendo entonces.
Moral-Reforma y El Tigre ofrecen el saber de dos estadios de la cultura maya en su impresionante trasiego y dominio por las selvas del sureste.
En paralelo, este año continuaron los trabajos en vistas a la apertura de dos sitios arqueológicos: Ichkabal (La Jornada, 12/10/22) y Paamul II. Vinculados con el proyecto de desarrollo económico y cultural, se remozan o edifican museos en Palenque, Ruta Puuc (Kabah), Dzibilchaltún, Chichén Itzá, Costa Oriental (Tulum) y Calakmul.
Paamul II tiene interesantes cuevas, como Manitas y Garra de Jaguar, al igual que cenotes. Ahí existe una gruta con evidencia de muros de contención construidos por los antiguos mayas, que quizá fungieron de refugios o recintos, informó en su momento Diego Prieto, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia.
El funcionario añadió que además de las antiguas edificaciones mayas existe ahí la cueva Ocho Balas. Refirió que este espacio obligó al ajuste del tramo 5 sur del Tren Maya para proteger los más de 300 edificios, algunos con alturas de más de ocho metros.
También se construyen centros de atención a visitantes en las zonas arqueológicas de El Tigre, Palenque, Moral-Reforma, Edzná, Xcalumkín, Uxmal, Dzibilchaltún, Chichén Itzá, Ek’Balam y Calakmul.
Este 2023, a cuenta del Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas, se abrieron áreas para la visita pública en Chichén Itzá y Uxmal, y se realizaron tareas de conservación en el Palacio, el Grupo IV, la tumba de Pakal y el Templo de la Cruz Foliada, en Palenque.
En el trazo del Tren Maya y su salvamento arqueológico, este año se han realizado impresionantes hallazgos que enriquecen el conocimiento de esa cultura. A principios de 2023, se informó que la cifra estribaba en 40 mil estructuras inmuebles
, y 766 mil 266 fragmentos de cerámica, a los que se sumaron constantes descubrimientos en excavaciones.
En septiembre se anunció que encontraron una tapa de bóveda en Ek’Balam con una figura de serpiente que sería clave para descifrar la historia de esa antigua ciudad maya. En el mismo sitio fue descubierto un doble enterramiento dentro de un antiguo depósito de agua, así como la imagen en roca de un cautivo.
El agosto anterior se informó que en Chichén Itzá, en Yucatán, se halló una interesante pieza
que evoca la figura maya tolteca de un atlante, pero con rasgos que lo vinculan con la cultura huasteca. De esa zona se publicó en noviembre el descubrimiento de una escultura de una gran cabeza humana con tocado de serpiente emplumada, en alusión a Kukulcán.
En la zona arqueológica El Tigre, Campeche, en noviembre se anunció la excavación de una estructura importante: un templo circular posiblemente dedicado a la misma deidad, que en el mundo maya representa a Quetzalcóatl. En agosto, ahí mismo se ubicó una ofrenda funeraria con dos vasijas usadas, en el enterramiento de una persona joven que aún portaba un anillo de jade.
En junio, el INAH refirió que halló una escultura en piedra que representa una deidad de la muerte, con rasgos mortuorios, y una vasija policroma. Estos son sólo algunos ejemplos de los descubrimientos más importantes este año a la vera del Tren Maya.