Viernes 22 de marzo de 2024, p. 8
Madrid. El nuevo número del manga Dragon Ball Super rindió homenaje a Akira Toriyama, creador de la saga, quien falleció el pasado primero de marzo a los 68 años a causa de un hematoma subdural agudo.
No hace mucho se dio a conocer que la responsabilidad de seguir con Dragon Ball Super recaería sobre las duchas manos del artista Toyotaro. Cuando comenzó a trabajar en la serie, Toriyama encomendó la tarea de dibujar la saga a su pupilo, quien se hizo famoso por ilustrar una popular continuación no oficial de Dragon Ball Z llamada Dragon Ball AF.
Por esa razón, el ilustrador rindió el mayor de los honores en la edición 103 del legendario manga, cuyas páginas se centran en la esperada batalla entre Goku y Gohan. Este episodio, titulado Una herencia del futuro, parecía ser un claro guiño a la muerte de Toriyama y a su decisión de confiarle su legado.
De hecho, así ha sido. Al concluir el número, que incluye un emotivo vistazo a la familia del Saiyajin, Toyotaro dedica unas enternecedoras palabras al creador de la longeva franquicia.
“Akira Toriyama, autor de muchas obras de la revista Jump ha fallecido. Todo el departamento editorial está profundamente afectado por la noticia. Me gustaría expresar mi profunda gratitud por habernos hecho disfrutar de sus grandes obras; esperamos que su alma descanse en paz.”
El lanzamiento del tomo 103 pondrá fin al emocionante arco de los superhéroes, aunque, al menos, habrá una entrega más a cargo de Toyotaro tras el fallecimiento de Toriyama. Más allá del manga, su legado continuará con uno de los últimos proyectos en los que estuvo involucrado: Dragon Ball Daima.
La nueva entrega de la longeva franquicia verá a Goku, Vegeta y compañía convertidos en niños y llegará en algún día 2024. Por otra parte, no se debe olvidar que la decisión final sobre el resto de las producciones que el icónico autor desarrollaba recaerá sobre los hombros de Akio Iyoku.
El editor en jefe de Dragon Ball, que posee los derechos de Goku y del resto de los personajes, será quien se encargue de mantener viva la obra de Toriyama a través de su compañía Capusel Corporation Tokyo tras romper su acuerdo con la editorial Shueisha.