Cruz Azul sufrió de más ayer, pero logró rescatar un valioso empate 2-2 ante el Atlas para afianzarse en puestos de clasificación directa a la liguilla en duelo correspondiente a la jornada 16, que se disputó en el estadio Ciudad de los Deportes.

Con este resultado, La Máquina, que hilvanó cuatro partidos sin conocer la derrota, llegó a 30 puntos y ascendió a la tercera posición de la tabla general, mientras los Zorros se quedaron en el lugar 16, con 14 unidades y ya con escasas posibilidades de ubicarse en puestos de repechaje.

Los rojinegros abrieron el marcador en los primeros minutos del encuentro, cuando el árbitro Luis Enrique Santander marcó una pena máxima en su favor por una falta en el área del guardameta celeste Kevin Mier sobre Jhon Murillo. El encargado de ejecutar el cobro fue Eduardo Aguirre, quien con un potente disparo logró invadir el arco contrario para poner el 1-0, al minuto 13.

Tras la anotación, los visitantes siguieron presionando con diversas aproximaciones de peligro, mientras los cementeros inquietaron en muy pocas ocasiones al portero rojinegro Camilo Vargas.

De esta manera, el segundo tanto de los Zorros no tardó mucho en llegar. Al minuto 38, Ángel Márquez sorprendió con un disparo cruzado muy cerca del marco celeste para ampliar la ventaja de su equipo por 2-0.

No obstante, los dirigidos por Martín Anselmi recortaron distancias en el marcador sólo unos minutos después, cuando al 40, tras un saque de esquina y una serie de rebotes en el área, el balón quedó al alcance de Ignacio Rivero, que con un remate de cabeza lo mandó al fondo de la red para conseguir el 2-1 antes de irse a los vestidores.

Recompensa al esfuerzo

En el segundo tiempo, los celestes salieron decididos a rescatar al menos el empate, por lo que se lanzaron con todo al ataque en busca de su segundo tanto. Primero amagaron con un remate que se estrelló en el poste izquierdo y después intentaron con disparos desde larga y media distancia, pero no lograban vulnerar la portería de Vargas.

La recompensa al esfuerzo de los cementeros finalmente llegó al minuto 71 por conducto de Camilo Candido que con un disparo desde fuera del área clavó el balón en el marco rival para emparejar los cartones (2-2).

En la recta final, los locales siguieron acechando la cabaña rojinegra y estuvieron muy cerca de conseguir el gol en varias ocasiones, pero ya no pudieron hacer daño a los Zorros y tuvieron que conformarse con la repartición de unidades.