Tijuana, BC., Baja California dejará de recibir 493 millones de metros cúbicos de agua del río Colorado en los próximos tres años, necesarios para mantener la producción de energía eléctrica de la presa Hoover, ubicada entre Nevada y Arizona, en Estados Unidos; en tanto, el gobierno de ese país financiará en México obras de infraestructura hídrica y mejoramiento de la calidad del agua por 65 millones de dólares, según lo acordado en el Acta 330 firmada por ambos países.

De esos 65 millones de dólares deberá salir la compensación para los productores del Valle de Mexicali que dejen descansar sus tierras los próximos tres años.

Ante la actual crisis por los bajos precios del trigo, el algodón y la alfalfa, entre otros productos, los agricultores podrán acogerse al programa de transferencia temporal de derecho de riego; es decir, cederán temporalmente el volumen de agua a la que tienen derecho y dejarán de cultivar.

Esa es la parte del recurso que se debe vigilar mucho más porque da margen a la opacidad: ¿quiénes, de todos los usuarios del distrito de riego 014, van a participar en el programa de compensación por ahorro de agua? Todos están en una situación difícil. Entonces, ¿quién sí y quién no?, cuestionó Alfonso Cortez Lara, profesor investigador del departamento de Estudios Urbanos y Medio Ambiente del Colegio de la Frontera Norte (Colef) y miembro del Grupo de Trabajo Emergencia por Sequía (G3) de la Comisión Internacional de Límites y Aguas entre México y Estados Unidos (CILA).

Opacidad de Conagua

Cortez Lara participó en las reuniones binacionales para la firma del Acta 330, signada el pasado 19 de abril por ambas naciones, y explicó que en abril de 2023 se iniciaron los trabajos y su petición a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) fue siempre que liberara la información, no sólo para que los ciudadanos estén enterados de los conflictos por el agua, sino sobre todo los productores.

El Acta 330 es un documento para establecer medidas adicionales de conservación del líquido a las ya establecidas en el Acta 323 de 2017.

El 5 de diciembre de 2023 fue la tercera reunión y el 23 de febrero pasado hubo una más; sin embargo, el gobierno no dio a conocer la información hasta tres días antes de la firma del acta, apuntó.

Respecto a las obras de infraestructura, consideró necesario conocer información más detallada sobre los trabajos que se llevarán a cabo. Qué canal grande, mediano o chico, qué compuertas, insistió el investigador.

Dijo también que la Conagua cuenta con 45 días para entregar a CILA el programa de infraestructura que será fondeado con los 60 millones de dólares (los otros 5 son para mejorar la calidad del líquido) que entregará el gobierno de Estados Unidos a cambio de retener un volumen de agua superior a lo pactado en el Acta 323.

Del total acordado, serán 164 millones de metros cúbicos de agua retenidos en 2024; 247 en 2025 y 83 millones de metros cúbicos en 2026, adicionales a los recortes acordados en el Acta 323 (99 millones de metros cúbicos por año). La de este periodo de tres años es la tercera reducción acordada desde la firma del tratado, en 1944.

“La pregunta es: ¿por qué la opacidad del lado mexicano? En Estados Unidos la negociación se ventiló públicamente porque California, Arizona y Nevada también sufrieron un recorte.

Los agricultores necesitan saber en qué parcela, en qué módulos de riego les van a quitar volumen. Debe vigilarse que el mecanismo de compensación se aplique de manera justa y equitativa para los usuarios de riego del Valle de Mexicali porque de eso depende que se garantice el agua de la costa de Baja California, demandó el investigador del Colef.

Una bolsa de esos 60 millones de dólares, seguramente la más grande, se destinará a las obras de infraestructura que gestionan la Conagua y el distrito de riego, explicó.

Para Alfonso Cortez (la reducción) era una medida necesaria para no poner en riesgo el nivel de la presa Hoover, que es de 272.79 metros sobre el nivel del mar, necesario para producir energía, y estamos muy cerca de ese nivel, acotó.