Conocida por su innovadora mezcla de música, teatro y poesía, la compañía Aderiva se prepara para deslumbrar nuevamente con su espectáculo Fábulas para náufragos, que tendrá dos funciones gratuitas este fin de semana en la Plaza de las Artes del Centro Nacional de las Artes (Cenart).

Inspirada en el cuento prehispánico La tristeza del maya, la historia narra la vida de Canek, joven que lucha con valentía por su tierra y su comunidad. A través de ritmos latinoamericanos, máscaras de nahual y la inclusión de un títere, Aderiva promete dejar una profunda huella en el corazón de cada espectador.

Somos un grupo musical que tiene una década de vida. Hace un año se nos ocurrió hacer un relato utilizando nuestras canciones como hilo conductor. Así nació esta iniciativa, explicó Pedro Ordoñez (Ciudad de México, 1984) en entrevista con La Jornada.

Presentamos la obra por primera vez en plazas públicas y mercados de la capital. Ahora, la versión mejorada incluye un títere que personifica a Canek, lo que suma una nueva dimensión a la trama.

Pablo Hernández (Ciudad de México 1983), también integrante de la compañía, añadió que el uso de máscaras de nahual es una de las características distintivas de la obra, pues éstas representan animales icónicos de la fauna mexicana: un tlacuache, un tecolote, un jaguar, un ajolote y un lobo mexicano.

Estos nahuales son personajes con características humanas que aportan tanto buenos como malos consejos al protagonista.

El títere de Canek, diseñado por Edwin Torres de Teatro de la Materia, es una pieza central del espectáculo. Es como una mojiganga que se coloca encima del actor, comentó Ordoñez; puntualizó que la música original “es una fusión vibrante de ritmos latinoamericanos combinados con pop y poesía.

Nuestras canciones siempre tienen una historia de fondo. Nos inspiramos en la vida en México y Latinoamérica, reflejando nuestras experiencias y emociones a través de las artes sonoras.

Canek es un joven maya que sufre tristeza, enojo y confusión debido a la desaparición de su madre, quien fue defensora de su tierra natal. Ante esta situación, su abuela decide hacer un llamado a los nahuales para que guíen a su nieto. Sin embargo, estos seres tienen sus propias personalidades y le darán consejos traviesos o reflexivos. El protagonista tratará de seguir su camino, pero acompañado por su comunidad.

Aderiva está integrado por Ricardo Ortizgris (batería), Armando Cabrera (bajo), Pedro Ordóñez (charango, acordeón, requinto jarocho), Pablo Hernández (voz, guitarra y charango) y Erándeni Yáñez (voz, percusiones y narradora). Paolina Orta interpreta a la abuela y al títere de Canek.

Hernández enfatizó que la puesta no sólo se centra en una narrativa, sino también en crear un espacio de catarsis para los visitantes.

Ponemos un altar en el centro del escenario donde los asistentes pueden escribir mensajes y depositarlos en botellas grandes. Esto simboliza la idea de que todos somos náufragos.

Fábulas para náufragos tendrá funciones hoy y mañana a las 12 horas en la Plaza de las Artes del Cenart (Río Churubusco 79, colonia Country Club Churubusco).