Jueves 25 de julio de 2024, p. 26
Madrid. El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, solicitó al juez de audiencia provincial de Madrid, Juan Carlos Peinado, testificar por escrito en su citación del próximo martes, en la que fue convocado a declarar como testigo en el proceso judicial abierto contra su esposa, Begoña Gómez, investigada por los delitos de corrupción en negocios y tráfico de influencias.
Sánchez argumentó su condición de jefe del Ejecutivo para beneficiarse de esta prerrogativa, que le permitiría dar sus respuestas por escrito y no someterse al interrogatorio del magistrado.
En una carta, Sánchez respondió a la citación judicial del juez Peinado: por razón de mi cometido como presidente del gobierno, mi declaración se deberá prestar por escrito
, y apela a la Ley de Enjuiciamiento Criminal, en la que se establece que están exentos de concurrir al llamamiento del juez, pero no de declarar, pudiendo informar por escrito sobre los hechos de que tengan conocimiento por razón de su cargo el presidente y los demás miembros del gobierno
.
El juez Peinado tenía la intención de acudir a la residencia oficial del presidente del gobierno, La Moncloa, para llevar a cabo el interrogatorio, pero ahora deberá decidir en función de lo que argumenta el mandatario.
Sánchez ratificó su voluntad de colaborar con la administración de justicia.
En tanto, el presidente se reunió con el presidente de la comunidad autónoma de Cataluña, Pere Aragonés, quien se encuentra a la espera de ser remplazado en el cargo tras las elecciones del 12 de mayo. Ambos dirigentes hicieron oficial el traspaso de las competencias en el sistema del ingreso mínimo vital, tal y como habían acordado en los meses previos para sacar adelante la investidura del gobierno de Sánchez, al tiempo que el líder catalán insistió en sus reivindicaciones de condonar la deuda pública de la región, que asciende a 15 mil millones de euros, y consolidar la autonomía fiscal total de la comunidad autónoma.