Joaquín Guzmán López, El Güero, es uno de los hijos que Joaquín El Chapo Guzmán Loera tuvo con su segunda esposa, Griselda López.

El Departamento de Justicia estadunidense ubicó a Guzmán López como uno de los cabecillas de Los Chapitos, como se conoce a los hijos de Guzmán Loera, que integran una facción del cártel de Sinaloa en la que también participan Iván y Alfredo Guzmán Salazar.

Ese grupo delictivo es considerado como la parte más poderosa del cártel de Sinaloa tras la detención y extradición a Estados Unidos de El Chapo Guzmán.

Para el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas estadunidense, tanto Joaquín como Ovidio Guzmán López incursionaron en el lucrativo negocio del padre, tras el asesinato de su hermano Édgar, en mayo de 2008 en Culiacán, Sinaloa.

Incluso el Programa de Recompensas de Narcóticos del Departamento de Estado señaló en su momento que ambos hermanos heredaron gran parte de las ganancias de la droga y comenzaron a invertir fuertes cantidades de dinero en la compra de mariguana en México y cocaína en Colombia.

Las investigaciones de autoridades estadunidenses también refieren que tanto Joaquín como Ovidio coordinaron la compra y tráfico de efedrina desde Argentina a México.

En enero de 2023, el Departamento de Estado de Estados Unidos ofreció una recompensa de 5 millones de dólares por información que condujera a la aprehensión y/o condena de Joaquín Guzmán López y otros 5 millones por Ovidio Guzmán López, actualmente preso en aquel país.

Estados Unidos aún ofrece una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información que conduzca a la aprehensión y/o condena de Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar.