
Martes 21 de octubre de 2025, p. 23
Un total de 4 mil 445 vuelos dentro, hacia o desde Estados Unidos se habían visto afectados hasta el lunes por la tarde, según el sitio web de seguimiento de vuelos FlightAware. A la vez se cancelaron 67 vuelos, luego de la Administración Federal de Aviación (FAA) continúa luchando con la escasez de personal causada por el cierre gubernamental en curso.
Hablando en Fox & Friends, el secretario de Transporte de Estados Unidos, Sean Duffy, señaló que muchos controladores de tráfico aéreo estaban buscando fuentes alternativas de ingresos para “mantener a sus familias a flote” mientras continúa el cierre.
A principios de este mes, más de 23 mil vuelos sufrieron retrasos de más de una semana, y Duffy atribuyó más de la mitad (53 por ciento) de los retrasos a problemas de personal, en comparación con el 5 por ciento habitual. A pesar de ello, instó a los trabajadores a presentarse a trabajar.
El control del tráfico aéreo se ha convertido en un punto álgido del debate sobre el cierre, con republicanos y demócratas culpándose mutuamente. Sindicatos y aerolíneas han instado a una rápida solución del estancamiento.
A 20 días del comienzo de la parálisis presupuestaria en Estados Unidos, sus efectos se extienden a cada vez más sectores del gobierno federal y el lunes llegaron a la defensa nuclear del país.
La Administración Nacional de Seguridad Nuclear (NNSA) suspendió temporalmente a unos mil 400 funcionarios federales (desempleo técnico), mientras que menos de 400 garantizarán el mantenimiento de las armas nucleares estadunidenses durante este “shutdown”.
El legislador republicano Mike Rogers, que preside la Comisión de Fuerzas Armadas de la Cámara de Diputados, declaró el viernes que había sido informado de que la NNSA estaba “a punto de agotar los fondos de emergencia que estaba utilizando.
“Va a tener que prescindir de 80 por ciento de sus empleados”, afirmó Rogers, aunque precisó que se trata de despedidos temporales y no definitivos.
El asesor económico de la Casa Blanca, Kevin Hassett, declaró a CNBC que “es probable que el cierre termine en algún momento de esta semana”, refiriéndose al líder demócrata del Senado, Chuck Schumer.
Hassett, director del Consejo Económico Nacional, dijo que sus “amigos en el Senado” creían que era “mala óptica que los demócratas abrieran el gobierno antes de las concentraciones No Kings (No a los Reyes) y que ahora hay una posibilidad de que esta semana las cosas se arreglen”.
Manifestantes de todas las edades salieron el sábado a las calles en todo Estados Unidos, denunciando lo que consideran tendencias autoritarias y corrupción desenfrenada del presidente estadunidense Donald Trump.
Una vez terminadas las protestas, Hassett señaló que si el cierre no termina, la Casa Blanca consideraría más medidas de recorte de gastos.