MEXICO S.A.

Ť Carlos Fernández-Vega

POCO DESPUÉS DEL 11 de septiembre, la onda expansiva generada por los atentados terroristas en el vecino del norte impactó uno de los renglones más importantes de la actividad económica mexicana y comenzó a golpearlo. Era inevitable, pero la autoridad optó por minimizar la repercusión que tal evento tendría en la comunidad de mexicano-americanos, pero especialmente en el ejército de connacionales indocumentados empleados en Estados Unidos.

IMPLICITO ESTA EL RIESGO de perder una parte importante de los aproximadamente 8 mil millones de dólares anuales que esa actividad aporta para la economía nacional, amén de los millones de empleos y la seguridad para sus familias, así como el regreso multitudinario de los mexicanos indocumentados y la presión política, económica y social interna que ello implica, ante la falta de capacidad de respuesta de las autoridades. Pero lo anterior fue tomado a chunga y el gobierno mexicano -con mister amigou Juanito Hernández como vocero- calificó dichas advertencias como simples aceleres y, creyéndose en campaña, ofreció, una vez más, lo que a todas luces incumpliría: recibir a quien decidiera regresar rapidito, de buen modo y con todas las de la ley (casa, comida y sustento).

PERO NO. TRES MESES después de los avionazos y sus consecuencias, en plena recesión, el desempleo al alza y con el primer recorte autorizado para un raquítico presupuesto que todavía no se autoriza, la situación se complica para los mexicanos -indocumentados o no- que han perdido su empleo en Estados Unidos. De acuerdo con un despacho de Notimex, la tasa de desempleo en Estados Unidos ha registrado un sensible incremento, que tiene en los hispanos a uno de los segmentos poblacionales más afectados.

LAS MAS RECIENTES estadísticas del Departamento del Trabajo reportan que en noviembre la tasa de desempleo en aquel país afectó a 5.7 por ciento de la población económicamente activa. Sin embargo, el mismo indicador se incrementó a 7.6 por ciento para los trabajadores de origen hispano, de los que el grueso son mexicanos o de origen mexicano. En septiembre, dicho indicador fue de 6.4 por ciento, en octubre creció a 7.2 por ciento y en el undécimo mes de 2001 alcanzó 7.6 por ciento.

LA COMUNIDAD HISPANA es una de las minorías étnicas que más ha resentido el problema de la caída en la productividad y consumo interno, lo cual se ha reflejado en la cancelación de plazas de trabajo. El mercado laboral ha sufrido sacudidas importantes en los últimos tres meses, después de los ataques terroristas a Nueva York y Washington, que en un solo trimestre mostró una reducción de 1.2 por ciento.

EL DESEMPLEO ENTRE la comunidad hispano parlante que trabaja en Estados Unidos sólo es superada por la de los afroamericanos, que en noviembre llegó a 10.1 por ciento, 0.4 por ciento más que en octubre. "Con la caída en el consumo interno se han cerrado muchas plazas de trabajo en el sector de las manufacturas y en el área de servicios, sectores dentro de los cuales los hispanos desempeñan un papel importante en la fuerza laboral. El incremento registrado el mes pasado en la tasa nacional de desempleo llegó a un nivel que no se daba en Estados Unidos desde 1995, y lo mismo ocurrió para las minorías étnicas como los hispanos y afroamericanos", señala Notimex.

LOS PRONOSTICOS DE los analistas económicos independientes sobre este indicador, estiman que el desempleo en Estados Unidos superará 6 por ciento al cierre de 2001. "Este pronóstico de malas noticias para la economía nacional tiene repercusiones todavía más negativas para los hispanos, por lo cual los analistas estiman que el mercado laboral de esta minoría perderá otro 0.4 por ciento de su fuerza. Desde los ataques terroristas a la fecha, el Departamento del Trabajo de Estados Unidos reportó que oficialmente se han perdido un millón 200 mil plazas de trabajo en varios sectores de la productividad del país".

EL IMPACTO PARA los trabajadores mexicanos indocumentados ha sido severo desde los atentados del 11 de septiembre pasado. Pero como ha sucedido en otras ocasiones, cuando la política migratoria estadunidense se endurece o la economía del vecino país le agarra cariño al ciclo recesivo, los millones de candidatos a cruzar la frontera norte para emplearse en Estados Unidos tienen toda la paciencia e inteligencia del mundo para hacer frente a la adversidad que provocan este tipo de acontecimientos.

''LA MIGRACION DE mexicanos a Estados Unidos ha descendido ligeramente este año en las personas con permanencia temporal, pero crecerá 50 por ciento en 30 años entre los emigrantes que desean residir en ese país", de acuerdo con el Consejo Nacional de Población.

EL EFECTO, DESDE luego, no es exclusivo para México. América Latina y el Caribe reciben cada año alrededor de 20 mil millones de dólares en remesas de sus inmigrantes en el extranjero, principalmente radicados -indocumentados y no- en Estados Unidos. De acuerdo con estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo, en la primera década del siglo XXI la región podría incrementar en 50 por ciento el volumen de divisas captadas por dicho concepto, es decir hasta 30 mil millones de dólares anualmente. En países como El Salvador, el impacto de dichas remesas se expresa en 10 por ciento del producto interno bruto. En el caso mexicano, la proporción es de alrededor de 1.5 por ciento, que se traduce, también, en la mejoría de miles de pequeñas comunidades que basan su economía en los fondos que regularmente giran sus paisanos desde Estados Unidos.

Las rebanadas del pastel:

EN LOS PRIMEROS 10 meses del año, el déficit comercial fue de 6 mil 700 millones de dólares, informó la Secretaría de Hacienda, y explicó que el saldo negativo fue resultado de las revisiones a la baja de las exportaciones petroleras y agropecuarias, del aumento de las exportaciones manufactureras y el descenso de las importaciones de ese mismo tipo de productos. Las exportaciones totales descendieron 9.6 por ciento en términos anuales, en tanto las importaciones lo hicieron 8.3 por ciento durante el décimo mes del 2001... EL IPAB SOLO recuperará este año entre ocho y nueve mil millones de pesos por venta de activos, cifra inferior a lo presupuestado a principios de año, estimado en alrededor de 16 mil millones... FELICIDADES: sólo les falta recuperar como 100 mil millones de dólares... LA VENTA de armas y municiones creció de manera sustantiva en Estados Unidos desde los atentados del 11 de septiembre pasado, según estadísticas de la FBI, quien indicó que en septiembre pasado se recibieron 864 mil 38 solicitudes para revisar antecedentes de interesados en comprar armas o municiones, frente a 782 mil 087 del mismo mes de 2000. En octubre de 2001 se registraron un millón 29 mil 691 peticiones contra 845 mil 886 en el mismo periodo de 2000, y en noviembre 983 mil 186, contra 898 mil 598 un año antes.

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