Ť Admite Sharon que la violencia ha bajado pero descarta negociar un Estado independiente

Mueren 6 palestinos al enfrentarse con fuerzas israelíes

AFP Y DPA

Jerusalen, 30 de diciembre. Seis palestinos murieron este domingo a manos de soldados israelíes, en momentos en que el primer ministro Ariel Sharon reconoció que la violencia ha disminuido en los últimos días, pese a lo cual descartó cualquier negociación con los palestinos sobre la creación de un estado independiente.

El presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, lanzó por su parte un llamado a la comunidad internacional para que aproveche la tregua que ha logrado tras su llamado a poner fin a las operaciones militares contra Israel, para relanzar las negociaciones.

Responsables militares israelíes indicaron que tres palestinos que intentaban introducirse en un puesto militar israelí atacaron un vehículo blindado del ejército, ubicado en las cercanías de la colonia judía de Alei Sinai. Tanques israelíes respondieron y dispararon obuses en dirección a los asaltantes, a los que dieron muerte.

Más tarde, otros tres palestinos que portaban armas y material explosivo con los que pretendían entrar a territorio de Israel para, presuntamente llevar a cabo un atentado, fueron abatidos por las fuerzas is-raelíes en el norte de la Franja de Gaza.

Horas antes de ese ataque, el primer ministro de Israel descartó cualquier negociación sobre la creación de un Estado palestino mientras "la violencia y el terrorismo continúen", aunque tanto el gobierno como el ejército israelíes admitieron nuevamente que la violencia ha disminuido.

El ejército dijo que los ataques contra israelíes diminuyeron en las últimas semanas, luego del llamado que hizo Arafat el 16 de diciembre para que éstos cesaran, y del anuncio de un alto al fuego.

Pero en la sesión semanal del gabinete, que se reúne los domingos, Sharon atribuyó la calma a la vigilancia de las fuerzas de seguridad israelíes y a la presión internacional para que el líder palestino tome medidas contra los grupos extremistas.

Además, el gobierno israelí consideró que la Autoridad Nacional Palestina no ha está luchando todavía con la fuerza necesaria contra las "organizaciones terroristas".

En contraposición con esta declaración, la policía palestina detuvo este día a cuatro palestinos presuntamente relacionados con el asesinato del ministro israelí de Turismo, Rejavam Zeevi, el 17 de octubre pasado. Los detenidos eran militantes del Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP), del Frente Popular para la Liberación de Palestina y del movimiento islámico Hamas.

Estos arrestos forman parte de la campaña de neutralización de los extremistas lanzada por Arafat el 16 de diciembre, aunque un responsable israelí no identificado aseguró que sólo 10 por ciento de los extremistas que figuran en la lista de 33 nombres elaborada por Israel y entregada a la ANP por el mediador estadunidense en Medio Oriente, Anthony Zinni, fueron arrestados hasta el momento.

Precisamente, Zinni se prepara a retornar a la región, para lo cual dirigentes estadunidenses reanudaron contactos con Israel en busca de que el enviado continúe su misión de encontrar fórmulas para la reanudación de las negociaciones de paz.

Desde Beirut, Arafat destacó la necesidad de dar una oportunidad a los esfuerzos de paz, a la aplicación de los principios que originaron el proceso de pacificación de Madrid -en 1991- así como los acuerdos ya concluidos entre Israel y la ANP, tras advertir que la paciencia del pueblo palestino tiene límites.

"Hemos respondido al llamado de la comunidad internacional a preparar el camino para las conversaciones de paz y frenar las excusas israelíes, pero si los israelíes continúan con sus asesinatos y masacres contra nuestra gente no estaremos en condiciones de continuar con nuestro silencio", sostuvo.

Entre tanto, el ejército israelí impidió este día a unos 200 pacifistas occidentales viajar de Jerusalén a Hebrón, para un acto de solidaridad con los palestinos. Un portavoz militar israelí señaló que el camino hacia esa localidad cisjordana fue decretado como "zona militar cerrada".