Exclusiva con el escritor Jean-Claude Carrière, colaborador de Luis Buñuel
El guionista, contador de historias; la humildad, condición para narrarlas
Estamos en medio de una guerra entre el cine comercial y artístico; Estados Unidos quiere borrar las industrias locales para conquistar todos los mercados, alerta La relación AL-España, su pasión
CARLOS PAUL
Jean-Claude Carrière (Francia,1931) es guionista de las películas Bella de día, Discreto encanto de la burguesía, Ese oscuro objeto del deseo y La vía láctea -todas dirigidas por Luis Buñuel-; El tambor de hojalata, de Volker Schlöndorff; Danton, de Andrzej Wajda, y Milou en mai, de Louis Malle. También es compositor de algunas canciones para Juliette Greco o Jeanne Moreau, y colaborador cercano de Peter Brook, para quien escribió la adaptación de Timón de Atenas, La conferencia de los pájaros y El Mahabarata. Ahora se encuentra en México para continuar su trabajo acerca de sus más significativos intereses: la relación entre América Latina y España.
Carrière es también autor de la obra La controversia de Valladolid, en la que aborda la polémica entre Bartolomé de las Casas y el filosofo Ginés de Sepúlveda para determinar si los indígenas poseían un alma semejante a la de los españoles.
Su primera visita a México fue en 1964; luego regresó cuatro o cinco veces para trabajar con Luis Buñuel, hasta que el director murió en 1983. También estuvo en 1993. "Ahora, como siempre, he venido para trabajar" a México, donde "me siento como en mi casa". comenta en entrevista con La Jornada.
Uno de sus principales intereses desde su primera visita "es la relación entre América Latina y España, una relación que para mí es muy extraña, pues se mezclan una serie de problemas y sentimientos. Hay dos países que me interesan mucho, uno es India y el otro es México.
"En estos momentos estoy encantado con la publicación del libro de fotografías India-México. Vientos paralelos, en el que se da un interesante cruce de miradas".
Carrière preparó un texto para ese volumen. En él habla de su "relación personal" con la fotografía, pues "más que fotógrafo, soy cineasta".
También, de manera reciente, publicó El círculo de los mentirosos, colección de historias antiguas y contemporáneas -zen, sufis, chinas, judías, indias y africanas-, que a lo largo de sus viajes por el mundo ha escuchado y recopilado.
Ese volumen, destaca, "es el resultado de muchos años de mi vida. Espero tener tiempo para realizar otro libro semejante. Quizá lo publique dentro de 10 o 15 años".
Esas historias, dice, "son otra manera de ejercer el poder. El poder del contador, cuya fuerza radica en su anonimato. Esos cuentos no son obras de la imaginación de un autor, son historias casi anónimas nacidas del pueblo para decir lo que nadie había dicho antes. Son historias que corren por las calles como una subversión", cuya existencia ''me han interesado siempre, así como el poder invisible del contador".
En el cine, añade, "el guionista es un contador. Las historias que yo conté no son las historias de Jean-Claude Carrière, sólo participe en la elaboración de una película, con un director, con unos actores, etcétera. Sin embargo, de vez en cuando hay una escena que es totalmente mía, pero anónima, nadie lo sabe, eso me gusta mucho.
''A lo largo de los siglos -continúa Carrière-, la situación del contador se ha ido trasformando. En el pasado lo encontrábamos en una plaza en Marruecos y ahora lo vemos encarnado en la figura del guionista, quien es el contador de hoy, pero manteniendo su carácter anónimo, impersonal".
En El círculo de los mentirosos "a veces la mentira tiene mucho más verdad que la verdad misma", dice Carrière.
-ƑCómo lo han trasformado esas historias?
-La única cosa que no se puede decir es que el contador hable de sí. Es imposible. El contador necesita de la humildad para jamás hablar de sí; eso es su fuerza, porque la historia nació de todo un pueblo, como el de esta historia que no se encuentra en el libro. Es corta, una maravilla.
"Existe un hombre muy rico y uno muy pobre; es una situación, como siempre, muy sencilla. El hombre muy rico, como es natural, tiene un hijo muy rico y el hombre muy pobre tiene un hijo muy pobre. Un día el hombre muy rico se lleva a su hijo a la cima de una pequeña montaña y le dice: 'Mira, un día todo eso que ves será tuyo'. Luego, el hombre pobre lleva a su hijo a la misma montaña y le dice sencillamente: 'Mira'.
''Creo que es una historia extraordinaria a propósito del ser y el tener. No conozco ningún ensayo que diga tantas cosas con tan pocas palabras".
Hollywood, rapaz
-Para usted existen dos modos de hacer cine: el estadunidense y el de otros países. Con lo sucedido el 11 de septiembre, Ƒcambiarán esas maneras?
-Por el momento no cambia, al contrario. En el mundo, es verdad, existen dos concepciones de cine totalmente diferentes. Para los estadunidenses el cine, una película, es un producto comercial, como el refresco o la pasta de dientes. Esta manera de concebir el cine abarca también la literatura, la poesía, el teatro. Sin embargo, existe otra concepción: la de los demás países, en los que el cine es también una obra artística. Desde los inicios del cine hasta los años setenta ambas concepciones vivieron juntas de manera pacífica, pero con la unificación de Europa, Estados Unidos se lanzó a una batalla tremenda para conquistar el mercado y eliminar el otro cine, el de autor, el artístico. Algunos de esos cines han desaparecido, por ejemplo, el cine italiano, que no vio la llegada del enemigo.
"Ahora estamos realmente en medio de una pequeña guerra comercial y artística. El problema es que los autores de cine europeo jamás han pretendido eliminar el cine comercial de Estados Unidos, además sería imposible. No obstante, (los estadunidenses) quieren, lo dicen, eliminar el cine español, mexicano, para conquistar todos los mercados".
Respecto de su interés entre América Latina y España, Carrière explica que la relación de India con Inglaterra es totalmente diferente de la que existe entre Latinoamérica y España y Portugal. "Aquí la relación histórica es muy compleja. Al grado de que en nuestros días existe un convenio de colaboración con España para ayudar a restaurar las ruinas prehispánicas que en el pasado destruyó. Esto es muy interesante. La evolución de la humanidad aquí se ve de una forma muy concreta. Por ejemplo, el poder en los países latinoamericanos siempre ha sido sustentado por hombres blancos, existen muy pocos indígenas en la cima del poder. Creo que algún día lo veremos. Me interesa conocer lo que ha quedado del pasado, lo que se reutiliza, lo que se acepta, pero sin confesar que se acepta. Eso es un mundo de reflexión".
-ƑQué visión tiene del Ejército Zapatista de Liberación Nacional?
-No me gusta hablar de cosas que no conozco. Sin embargo, de una manera instintiva tengo una actitud de simpatía por los indígenas de Chiapas, porque recordemos que en ese territorio se encontraba Fray Bartolome de las Casas, protagonista de La controversia de Valladolid.