Las ganancias elevarían la inversión en la paraestatal

Se usa situación financiera de CFE para justificar propuesta privatizadora

ISRAEL RODRIGUEZ J.

Tanto en el anterior como en el actual sexenio se han manejado las cifras financieras de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de una forma que tiende a justificar las propuestas de privatización y apertura del sector eléctrico. Sin embargo, los resultados de operación de la paraestatal arrojan ganancias que podrían permitirle incrementar sus necesidades de inversión y de operación, aseguró José Luis Apodaca Villarreal, consultor y analista en temas energéticos.

El experto consideró que el precio de la tarifa doméstica debería ser de un peso kilovatio por hora (kwh) y la tarifa agrícola 0.699 pesos por kwh. "Esto permitiría incrementar los ingresos de la CFE en 15 por ciento, lo cual daría oportunidad a que después de cubrir los gastos de operación y de inversión se pagara un impuesto razonable de 4 por ciento sobre activos al gobierno federal. Además, el mismo gobierno debería pagarle a CFE el subsidio que se otorgue a los usuarios, como se haría si el sector eléctrico estuviera en manos de las empresas privadas".

José Luis Apodaca, también profesor universitario y ex gerente general divisional de la CFE, reconoce que existe un cierto grado de subsidio en las tarifas agrícola y doméstica actuales, pero no en la magnitud expresada por el gobierno federal.

En lo relativo a tarifas y costos, explicó que en las facturas actuales de consumo de electricidad de los usuarios domésticos se establece la cantidad que realmente se está pagando y también se indica qué monto corresponde al subsidio otorgado por el gobierno federal. Es frecuente que el usuario esté pagando 50 centavos por kilovatio hora (kwh) y que el subsidio que esté recibiendo sea de 1.20 pesos por kwh, para integrar un costo total de 1.70 pesos por kwh.

Sin embargo, en el decreto mediante el cual se aprueba el Programa Sectorial de Energía 2001-2006, se establece que actualmente se tiene una relación de 0.70 entre el precio de las tarifas eléctricas y los costos totales de CFE. Este índice refleja que en México el costo de generar, transmitir y distribuir la electricidad es de 30 por ciento superior a su precio de venta.

Apodaca Villarreal, ingeniero mecánico electricista, aclara que otras informaciones también oficiales disponibles sobre el comportamiento financiero de CFE " no son del todo consistentes con la magnitud de los subsidios y con esa relación de precio-costo". Como referencia, agrega, el reporte financiero de CFE de 2000 se indica que la liquidez de la empresa se comporta de la siguiente manera: ventas, 97 mil millones de pesos, sin incluir subsidios; gastos, 74 mil millones de pesos, y remanente 23 mil millones de pesos.

Esto implica, según Apodaca Villarreal, que los resultados de operación de CFE arrojan una ganancia de 24 centavos por cada peso que se recauda, sin recibir aportaciones del gobierno federal por los subsidios que otorga a los usuarios. "Esta situación equivale a que CFE está pagando los subsidios que se proporcionan a algunas tarifas".

Para prueba, cita el experto, se puede consultar el Presupuesto Federal para 2002, en el que se destinan a CFE 86 mil millones de pesos para gastos de operación y tendrá ingresos por ventas de 115 mil millones de pesos.

Tomando como referencia 2000, las necesidades de inversión pueden resumirse en lo siguiente: las correspondientes a incrementar 2 mil 200 megavatios de generación, cuyo costo total en plantas de ciclo combinado sería de mil 300 millones de dólares, equivalente a 12 mil millones de pesos. También en promedio para ese año se hubiesen requerido 4 mil millones de pesos más para inversiones de transmisión, y 5 mil millones de pesos adicionales para inversiones de distribución.

En su reciente estudio ƑEstán muy subsidiadas las tarifas eléctricas en México?, difundido por la Mesa Ciudadana de Observación de la Energía, José Luis Apodaca señala que lo anterior significa que con sus remanentes CFE puede hacer frente a sus requerimientos de inversión, sin necesidad de financiamiento, ya que en 2000 sólo necesitaba 21 mil millones de pesos para la expansión del sistema eléctrico y atender el crecimiento de la demanda de electricidad, y aun sobrarían 2 mil millones de pesos.

Pero en el Estado de Resultados de CFE de 2000 se incrementan "virtualmente" los gastos de esta paraestatal por un total de 62 mil millones de pesos. Los rubros que lo componen son: depreciación, 16 mil millones de pesos; obligaciones laborales, 9 mil millones; impuesto por aprovechamiento, 37 mil millones de pesos.

El analista precisa que estos gastos "virtuales" no son realizados por CFE, y no se le han destinado recursos adicionales a esta empresa paraestatal para reposición de activos en su presupuesto de gastos; ni tampoco se le destinan recursos adicionales para pagar los sueldos de jubilados, y además no es razonable aplicar un impuesto de aprovechamiento tan alto (9 por ciento sobre los activos), toda vez que CFE es una empresa paraestatal que por mandato constitucional debe funcionar sin fines de lucro.

El consultor resume que esta forma de manejar las finanzas deriva en que a la CFE se le retire su remanente para hacer frente a sus compromisos. "También se llega al extremo de que el precio virtual de venta de la tarifa doméstica, por ejemplo, que comprende un subsidio muy elevado, alcanza un precio que podría ser de los más altos del mundo, porque sería del orden de 20 centavos de dólar por kilovatio hora. Por su puesto que este precio tan alto de la tarifa doméstica, discriminatoriamente casi duplica el costo real de suministro en el que incurre CFE".