Ya superamos la etapa de fogueo y a México, asegura, se le considera una potencia
Pesistas, obligados a ganar medallas, dice Gracia
Soraya Jiménez se dijo apenada por sus problemas de peso y aseguró que no se repetirán
ROSALIA A. VILLANUEVA
"México está considerado una potencia, ya no salimos a foguearnos ni a improvisar, porque el trabajo se demuestra con resultados y puedo asegurar que el equipo femenil de halterofilia ganará medallas en los Juegos Centroamericanos'', señaló tajante la sonorense Betzabé Gracia, tras regresar con tres áureas de la reciente Copa Cristal de El Salvador.
Con la sencillez que la caracteriza, la diminuta deportista alabó el esfuerzo de sus compañeras, pues ninguna regresó con las manos vacías poniendo a México en alto ganando un total de 18 preseas (12-3-3), que las ubicó en el primer sitio por equipos.
La campeona mundial juvenil en la división de 48 kilogramos subrayó que este fue un buen comienzo para el ciclo que iniciará con los Centroamericanos en noviembre próximo, porque se cuenta con selección completa en hombres y mujeres en levantamiento de pesas, lo que habla "del buen trabajo que está desarrollando la presidenta Martha Isela Elizondo. Ya no es solamente una (levantadora), somos tres o cuatro de nivel y puede hacerse un buen equipo''.
Betzabé dijo que esta competencia le sirvió mucho, pues aunque sus levantamiento no fueron lo que se esperaba, le permitió tomar confianza tras salir de una lesión e incorporarse a los entrenamientos bajo la supervisión del entrenador búlgaro Georghi Ivanov. "Tuve sólo tres días de preparación y todo salió bien''.
Entre sus planes inmediatos está la Copa Guatemala, el Panamericano Juvenil que se celebrará en ese país, un torneo en Bulgaria previo al Mundial y la justa regional salvadoreña.
La única rival que le puede dar pelea es la venezolana Remigia Alcira, quien no estuvo en El Salvador porque le negaron la visa.
Apenada porque no pudo dar el peso (58 kilogramos) y quedó fuera de las medallas, la campeona olímpica Soraya Jiménez prometió que no volverá a suceder y que el 16 y 17 de marzo competirá en un torneo de invitación en Melbourne, Australia.
"Perdimos un poco el control, el sauna estaba bastante retirado y tuvimos ese pequeño problema, pero no pasó a mayores. Estoy un poco triste porque me había preparado y sólo dí una exhibición mejorando mis marcas'', comentó.
Quien desbordaba felicidad era la universitaria chihuahuense Damaris Aguirre (75), ganadora de tres bronces en su primera participación internacional. "Tengo apenas un año en las pesas, me sentí nerviosa pero demostré que puedo; qué bueno que dí las marcas y logré esta experiencia'', manifestó la corpulenta deportista que enfrentó a la campeona mundial juvenil, la colombiana Tulia Medina.
El sonorense Alejandro Romo, campeón en los 56 kilogramos, dijo que le daba gusto no ser el único hombre que siempre acompañaba a las siete mujeres. "Hay nuevos talentos y lo que se requiere son más competencias'', anotó.