Puesta de Martha Luna que se estrena el miércoles
Los demonios de la fe muestra que la poesía
es todo, menos difícil
El montaje, retrato de Sor Juana,
según textos de Paz y Benítez
CARLOS PAUL
Con
base en fragmentos de Las trampas de la fe, de Octavio Paz; Los
demonios en el convento, de Fernando Benítez, y en la poesía
sacra y satíroburlesca de Sor Juana Inés de la Cruz, la puesta
Los demonios de la fe, dirigida por Martha Luna, se escenificará
desde el 6 de marzo en el Centro Nacional de las Artes.
Los textos, recogidos por las actrices Miriam Calderón
y Andrea Avila, son llevados a escena con el propósito '''de quitarles
un poco la sobriedad, volviéndolos más dinámicos,
para que su lectura sea más espontánea", comenta Calderón.
La obra ?en la que se tejen prosa y poesía? aborda
la infancia de la poeta, su ingreso al convento, su poesía satirícoburlesca
?donde hace algunos juegos de doble sentido?, su relación con Lisi,
el poema Primero sueño y un encuentro de Sor Juana con un
astronauta, escrito por Benítez.
Referente por siempre
El motivo para montar esos textos, señala Avila,
"es porque Sor Juana es referencia fundamental para las mujeres mexicanas
de siempre. Nosotras deseábamos armar un espectáculo con
poesía en el que nos sintiéramos involucradas de alguna manera.
Después de barajar algunas poetas, decidimos volver a los orígenes.
Sor Juana es origen y punto de llegada para nosotras como mujeres y actrices".
Con la participación también de la actriz
Magdalena Tenorio, en Los demonios de la fe el movimiento es un
elemento importante de apoyo, explica Avila.
La obra esta estructurada por 11 cuadros y hay ''algunas
frases que quizá puedan ser pesadas para el público, pero
al darles también una presencia física con el movimiento,
el espectador las puede apreciar tanto de manera visual como sonora''.
Acerca del vestuario, expresa Calderón, "sólo
manejamos algunos elementos, como togas y birretes, hábitos, escapularios,
velos de colores brillantes, sombreros, antifaces y mascadas''.
En el escenario "tenemos algunos biombos que nos sirven
para representar distintos espacios u objetos. La música va desde
la clásica, con composiciones de Mahler y Haendel, hasta temas más
contemporáneos como la música electrónica.
"El propósito -continúa Calderón-
ha ido cambiando conforme se ha desarrollado el proyecto. Para mí
ya no es sólo darle una lectura poética a esos textos maravillosos,
sino también encontrarles una claridad filosófica".
Según Avila, "es el disfrute de esa poesía
y hacer que el espectador, con nuestra interpretación, sienta lo
mismo, ya que la poesía es todo, menos difícil".
Pocos cambios en tres siglos
En el lapso de una hora, Miriam Calderón, Andrea
Avila y Magdalena Tenorio, dirigidas por Martha Luna, "recorren la vida
de Sor Juana Inés de la Cruz" para exponer "que el ser humano, luego
de tres siglos, ha cambiado muy poco y que hay que seguir cuestionando
nuestras debilidades, fortalezas y, sobre todo, ambigüedades, que
involucran el querer y el no querer".
Los demonios de la fe se presentará del
6 al 10 y del 13 al 17 de marzo. Miércoles, jueves y viernes a las
20 horas; sábados, a las 19; domingos a las 18 horas. Foro de las
Artes del Centro Nacional de las Artes. Río Churubusco y Tlalpan.