CUIDAD PERDIDA
Miguel Angel Velázquez
¿Qué pasó en el PRD?
ROSARIO ROBLES, como era de esperar, ganó la elección
del PRD y pese a ello, y también pese a ella misma, la secretaría
general de su partido quedará en manos de sus adversarios políticos.
PERO ¿QUE es lo que debe leerse en esta nueva situación?
Para empezar habrá que admitir que la fuerza de Robles en el país
no fue tanta como sus correligionarios esperaban. Luego, que la cantidad
de votos contados hasta el momento hablan de una fuerza perredista muy
disminuida o cuando menos no tan contundente.
COMO CARGA extra, y esto deberá ser analizado a
profundidad, el resultado final termina siendo poco creíble y ello
resta legitimidad a un triunfo importante de los aspirantes contra el aparato
partidista.
EL RESULTADO final de esta elección confirma, pese
a todo, que las instancias de gobierno del PRD deben ser cambiadas de inmediato
porque, como están, siempre servirán a los más altos
dirigentes y ello confunde y ensucia los procesos internos.
COMO YA se había dicho en este espacio, el tiempo
jugó en contra del rosarismo. Cada día que transcurrió
pesó en la elección tal vez mucho más que la misma
votación, porque pudo haber servido para presionar y sacar acuerdos
a favor de los amachuchos.
SERA MUY difícil enterarnos algún día
de qué fue lo que se cocinó entre los miembros más
destacados de las planillas uno y cuatro, aunque sería muy vergonzoso
si el proceso hubiera culminado con un "acuerdo".
Y ES que nadie puede creer eso de que la votación
fue mejorando para Ortega, porque a ese grupo nadie le tiene confianza
y en la imaginaria general fue necesario amarrar un acuerdo que impidiera
la ruptura del partido o bien se chantajeó al grupo de Robles por
haber cometido algún pecado inconfesable.
COMO SEA la cosa, los amachuchos preparan a quien
acompañará a Robles como segundo en importancia en el CEN
perredista, y ya se manejan dos nombres: uno es el de Raymundo Cárdenas,
y el otro, no por ello inferior en posibilidades, es el de Carlos Navarrete,
hasta ahora vocero del chuchismo-amalismo y quien no tiene responsabilidades
legislativas qué cumplir.
LA COSA es fácil. Jesús Ortega, que no se
va del partido ?eso sí lo cumplió? habría renunciado
ya a ocupar el segundo puesto en la cúpula perredista porque el
salario de senador no se compara con el de secretario general del PRD,
y aceptar el puesto en el partido sería tanto como perder dos veces.
LO MISMO sucede con Raymundo Cárdenas, quien ha
descubierto en las más recientes horas que su presencia es más
importante para la patria en la Cámara de Senadores que en las filas
del partido.
Y SOLO quedó "el del pollo", como diría
el mesero de las cantinas tradicionales cuando anuncia el número
ganador de la rifa del ave rostizada. Sí, sólo quedó
Navarrete, nombre que se empezó a manejar a la mitad de la semana
pasada, cuando en el cuartel general de Robles se decía hasta la
saciedad que el conteo de los votos daba un dos a uno inevitable y claro
a favor de la ex jefa de gobierno. ¿Qué pasó? Allá
ellos.