Moda dolorosa, segundo proyecto de Valerio Gámez
Iconos religiosos inspiran atuendos para un altar viviente
Se exhibirán el viernes en el centro histórico de Querétaro
CARLOS PAUL
Moda dolorosa se titula el segundo proyecto de Valerio Gámez, que consiste en retomar los atuendos de algunas imágenes religiosas, como el Cristo flagelado y la Virgen de los Dolores, para el desarrollo estético de un vestuario. ''Será un altar viviente que se podrá apreciar a través de un aparador" en la ciudad de Querétaro.
El concepto tiene su origen en las vestimentas que aparecen en las ''estampitas" en las que se aprecia el icono de San Antonio de Padua, El Sagrado Corazón, Animas del Purgatorio, San Judas Tadeo y el Cristo crucificado y resucitado.
Esta colección, expresa el artista, se basa en las imágenes mencionadas y en el color morado. ''El planteamiento es muy básico. Se trata de destacar los símbolos más reconocibles de esos iconos y con éstos elaborar distintos atuendos para integrar una propuesta visual."
Hay una Virgen de los Dolores con un abrigo de noche y una falda de fiesta y una blusa con bordados. Entre los accesorios hay unas botas largas en cuyos costados se grabó la simbología de las 15 estaciones del Viacrucis. También hay un Cristo -''adicto a la cocaína"-, cuyo traje (camisa, corbata, pantalones y saco) es de la tela brocada litúrgica (dibujos en dorado sobre un fondo morado) que usan los sacerdotes. ''En este caso se buscó un modelo cuya fisonomía se pareciera al Cristo de tez blanca y pelo largo con barba.
''Habrá otra Virgen de los Dolores. Está estará cargando al Cristo -en este caso moreno-, recién bajado de la cruz. Será una virgen elegante y barroca, con una falda larga bordada, que nada tiene que ver con una virgen pobre. Este Cristo llevará bordado su monograma en los calzones blancos y sus estigmas serán de un adicto a la heroína, quien será maquillado con algunos piquetes en los brazos y los labios secos. Otros atuendos llevarán bordadas sobre la ropa la simbología de los estigmas o la corona de espinas."
Lectura estética, nada más
-ƑQué te motivó para realizar el proyecto Moda dolorosa?
-Todo parte de las imágenes que tengo grabadas de cuando era niño y de que considero que buena parte de la memoria visual de las personas surge de las iglesias y la moda. Cualquiera debe pensar todos los días qué se va a poner, piensa en la combinación de colores y texturas. Sea o no adicto a la moda, siempre escoge algo que refleje su personalidad para integrarse a un grupo, sea el de los fresas, punketos, darketos o de los que trabajan en una oficina.
''La moda permite a las personas realizar de manera cotidiana una creación visual, sea de manera consciente o inconsciente. Igual sucede con los iconos de las iglesias. Al mirar esas imágenes, uno desarrolla cierto gusto estético. Como artista visual de una época que llaman posmoderna, me interesa esa mezcla. La combinación de los valores frívolos de la moda con los atuendos tradicionales de la religión.''
-ƑCuál es el propósito?
-No me interesa desacralizar los modelos religiosos; al contrario, retomar los atuendos sólo como modelos de una moda. Me interesa, por un lado, ser un fervoroso creyente para llegar a ellos de manera más profunda, con cariño y gusto; y, por otro, busco desarrollar una estética de moda y el estilo de vida que propone.
En 1999 Gámez desarrolló su primer proyecto, Tendencias guadalupanas, en el que diseñó siete atuendos para hombre y mujer mediante ''elementos simbólicos del manto de la Virgen de Guadalupe, como las estrellas, los arabescos, los rayos, los colores verdes y rosados".
Con ese trabajo ''la cuestión era jugar con la moda, los iconos religiosos y la identidad''. Era ''trasladar al icono de un plano bidimensional a uno tridimensional". Fue exhibido como una acción, tipo pasarela, en el encuentro Jóvenes del Tercer Milenio que se efectuó en el Palacio de los Deportes, y luego se presentó en el Museo Universitario del Chopo y en la Universidad Autónoma de Querétaro. Ahora, explica el artista visual, ''más que exhibir mi trabajo en pasarela, pues es muy costosa y difícil que luzca el concepto, me inclino por la fotografía como registro, para lo cual me ayudan un fotógrafo de modas, personas que cosen la ropa y maquillistas".
-ƑCuáles han sido las reacciones del público?
-Como es un proyecto cultural, no hay tanta controversia. La lectura del trabajo es estética. Sin embargo, algunas personas me han dicho que no debería trabajar con esos iconos. Por ejemplo, me han señalado que el manto de la virgen es intocable, pero no me interesa estar a favor o en contra del icono guadalupano, sino utilizarlo como elemento cultural. Para el Cristo crucificado, confecciono unos calzones que llevan un monograma bordado, pero las personas que me bordaban no quisieron hacerlo.
-ƑPara realizar esos trabajos tuviste apoyo teórico?
-Sí, principalmente en dos libros, La era del vacío y El imperio de lo efímero, del filosofo francés Gilles Lipovetsky, quien en distintos ensayos analiza la mercadotecnia, el consumo, la moda, los medios de comunicación masiva y cómo esos procesos y medios constituyen una dinámica que privilegia la imagen individual. En el segundo volumen reflexiona sobre los elementos sociales que estructuran la moda. Mi interés no es el de un diseñador de ropa, sino utilizar el lenguaje de la moda desde una perspectiva sociológica para hacer una propuesta visual.
(Valerio Gámez presentará Moda dolorosa, en una acción, el próximo viernes a las 19 horas en las calles de Corregidora y Morelos, centro histórico de Querétaro.)