La campaña previa contra el mandatario Hugo Chávez fue una "intoxicación", opinan

La credibilidad de los medios informativos en Venezuela, amenazada luego del golpe: expertos

Pide investigador que el gobierno reflexione sobre el uso de la radio y la tv del Estado

AFP

Caracas, 15 de abril. La ausencia total de información en prensa, radio y televisión en Venezuela el sábado y domingo, cuando los partidarios de Hugo Chávez luchaban por su vuelta al poder, amenaza seriamente la credibilidad de los medios de comunicación venezolanos, concordaron expertos consultados por Afp.

Calificaron de "intoxicación" la campaña previa de prensa y televisión en contra del mandatario, cuya caída la madrugada del viernes apareció como un "show dramático" televisivo.

Este lunes la gran prensa justificó que sus reporteros, fotógrafos y camarógrafos fueron alejados de la acción por las "amenazas y agresiones" de los grupos partidarios de Chávez.

"Creo que los medios, tanto del sector privado que son mayoría, como los estatales, jugaron a ser extremistas desde sus perspectivas. En el caso de los medios impresos y audiovisuales, se notó que apostaron al golpe en la manera tan unilateral en que cubrieron los hechos que se venían dando", dijo a la Afp Marcelino Bisbal, investigador en comunicación de la Universidad Central de Venezuela.

Si bien "los empresarios tienen que clarificar si los dueños de los medios pueden seguir siendo actores políticos ante la ausencia de una sociedad política (partidos opositores), los periodistas tienen que reflexionar sobre su profesión, porque cayeron en la tentación, muchos, de sentirse más protagonistas que la noticia", señaló Bisbal.

"Sus deseos antichavistas los realizaron al cumplir su responsabilidad pública", argumentó.

El viernes, cuando asumía el empresario Pedro Carmona la presidencia interina de Venezuela tras asegurar que Chávez había renunciado luego de violentos enfrentamientos entre opositores y partidarios al régimen, las televisoras cubrieron ampliamente este día, en el que los titulares de los principales diarios del país celebraron en sus primeras planas "la caída de Chávez".

Luego, el sábado amaneció con focos de disturbios en distintos puntos del país, Caracas era epicentro de saqueos, represiones y manifestaciones multitudinarias que reclamaban el regreso al poder del mandatario izquierdista de 47 años, mientras en las televisoras locales se repetían las imágenes del juramento de Carmona del día anterior, telenovelas y desfiles de modas.

"Temía mucho por mi vida, en la mañana fui al canal, informé de los saqueos que había visto en el trayecto y me dijeron que no iban a sacar nada al aire porque 'ya se les iba a pasar la locura'", dijo a Afp una reportera de televisión que pidió el anonimato.

Indicó que después, ella misma prefirió salir de la sede del canal por temor a represalias y hoy "no sé si renunciar, creo que cometimos un gran error", indicó.

Pese a este caso particular de arrepentimiento, el también investigador en comunicación José Urdaneta, como Bisbal, duda que los dueños de los canales impulsen algún cambio, "apostaría por que van a persistir en sus críticas desde sus medios".

Bisbal no dudó en criticar además a los medios estatales porque "también los han utilizado para fines proselitistas. Ahora el gobierno tiene que pensar qué significa tener una radio y una televisión del Estado".

"¿Tiene que ser una televisión y radio propagandista, o tiene que ser un medio de atención al público?", preguntó el investigador.

El presidente Chávez dijo este lunes, en rueda de prensa en cadena nacional, que garantizaba el respeto a los periodistas y pidió a sus seguidores más fanáticos que los dejaran trabajar. "Ellos, los fotógrafos y reporteros, no tienen la culpa."

El fotógrafo del diario 2001, Jorge Tortoza murió al recibir un balazo en la cabeza durante enfrentamientos entre opositores y partidarios de Chávez el jueves, y otros resultaron levemente heridos.

Hacia los dueños de los medios, Chávez también guardó un tono muy conciliador, aunque precisó a Afp que se está haciendo una investigación y, bueno, "espero que podamos invitarlos a una mesa de diálogo. Yo aún no tengo muy clara esta situación".

A principios de abril Ignacio Ramonet, director del semanario francés Le Monde Diplomatique, observó en Caracas que los titulares se estaban haciendo "en función de una batalla en la que los medios están participando", y predijo que ello traería "graves consecuencias al periodismo" de este país.

Señaló que en Venezuela los periodistas no van a buscar una historia, sino que llevan un "guión". Una crítica "obsesiva" hace creer al mundo que aquí siempre se está "al borde de una guerra civil" y en ese sentido ?dijo? "CNN en español tiene gran responsabilidad, pues presenta una visión sistemáticamente hostil al gobierno de Venezuela".